En la peña ‘El Trago’ se prepararon las botellas para que sus socios vayan bien provistos a la puesta del Pañuelico. Sus miembros trabajaron por la mañana en la barra, ubicada dentro de la peña, rodeados de refrescos y licores. Se mezclaron, según los cálculos de su presidente, Toni Soriano, un total de 600 litros, entre calimocho, gin-tonic y ron con cola. La bebida se repartirá entre los más de 450 integrantes de esta agrupación.

Cada peñista escogerá el envase con su licor favorito. Seis personas se encargaron de rellenar las botellas. Además, ‘El Trago’ llenó su tradicional y peculiar cuba. Su tonel es especial porque tiene forma de toro. Está instalado encima de una base con ruedas y también acompañará a los peñistas esta tarde por la plaza del Torico y sus alrededores.

Muchos otros grupos de jóvenes también hicieron, al margen de las peñas, acopio de suministros para hacer más llevaderas las altas temperaturas que se anuncian para la tarde de hoy –la previsión de la Aemet es de una máxima de 36 grados–. El hipermercado Simply de Teruel batió su récord de ventas en un día desde que se instaló en la ciudad hace 20 años. Un responsable de la gran superficie cuantificó el incremento en las ventas de cerveza y agua respecto a 2014 en un 20% y el de licores y refrescos en un 15%. A su juicio, el anuncio de mucho calor para el sábado y la relajación de la crisis dispararon las ventas.

A pesar de que el Ayuntamiento anunció que no permitirá el botellón, la sensación de los hosteleros es que esta practica está fuera de control, sobre todo en las zonas periféricas de la ciudad.

La Asociación Provincial de Empresarios Turísticos tiene clavada la espina del botellón en La Vaquilla. La patronal hostelera se muestra "preocupada" con una forma de ocio juvenil que aporta "un consumo nulo" en bares, cafeterías y barras callejeras. "Muchos se traen la bebida y todo lo que necesitan de fuera, salvo el hielo, porque no pueden", dijo un empresario. La misma fuente comentó que un hotelero recibió ofertas para alquilar sus plazas de parquin para que grupos que vienen a hacer botellón pudieran descansar dentro de sus coches a la sombra y en un lugar vigilado. El empresario rechazó la propuesta.