Empate de oro para la final en El Alcoraz
El Huesca deja tocado al Huracán después de un trabado encuentro con polémica incluida por el gol oscense, que el árbitro dio por válido pese a haberlo anulado antes el asistente.
Un tanto de Tyronne, que en un primer momento fue anulado por el asistente, pero que al final subió al marcador, supone un seguro de oro para los de Tevenet, a los que el empate a cero en El Alcoraz (donde no pierden desde octubre de 2013) les serviría.
En el campo de San Gregorio se vivió un partido de ida y vuelta, de balones largos en busca de un defensa adelantada o un central despistado, con ocasiones en ambas porterías que fueron ganando en peligro según avanzaron los minutos. Más tensión que fútbol, donde la vistosidad de la que habían hecho gala los azulgranas en la anterior eliminatoria contra el Ferrol dio paso a un juego bastante bronco, sin un dominador claro y con muchas interrupciones.
Tevenet optó por descartar la posible defensa de cinco que llegó a trabajar durante la semana y aunque finalmente hubiera apostado por ella, hubiera tenido que recurrir a un plan B, ya que Rojas, que se había recuperado de sus molestias, recayó durante el calentamiento, dejando su lugar al canterano Álex García y sin central suplente ya que Scardina se había quedado fuera por lesión.
El Huracán buscó ya desde los primeros minutos la desesperación de unos oscenses con el cartel de favoritos pero condicionados por un campo muy pequeño y con el temido césped artificial. Manolo era el más perseguido por los valencianos, conocedores del carácter temperamental del andaluz, que ya le jugó una mala pasada ante el Nástic de Tarragona.
Lograron los de Tevenet esquivar esa ratonera durante la primera parte, con continuas ocasiones, pero sin llegar a poner en verdaderos apuros al portero del Huracán. En los valencianos, Aridai era el más peligroso, buscándole continuamente las cosquillas a Josan, por momentos desbordado.
Al filo del descanso tuvo la más clara el Huesca, en una conexión entre Camacho y Mainz dentro del área, que logró colarse entre la defensa local, pero que el de Sádaba envió rozando el palo.
En la reanudación salió más enchufado el Huracán, con varias ocasiones claras, pero en el 54 llegaría la jugada polémica. Mainz remata y su rechace es aprovechado por Tyronne para batir a Paco. Al disparar, el zaragozano está detrás el portero, aunque evita intervenir en la acción. El árbitro señala gol, pero el asistente indica fuera de juego posicional, llevando la confusión a San Gregorio, aunque finalmente el gol subió al marcador, para enfado de Seligrat, que terminó expulsado, y de la grada, la misma que hace unas semanas celebraba la polémica victoria de su equipo frente al Logroñés.
Le duró poco más de 10 minutos la alegría a los oscenses, ya que en una falta desde la frontal del área, Amarilla, libre de marca, peinó hacia atrás y envió el balón dentro. El juego entró en un carrusel poco beneficioso para los oscenses y recordó a los peores momentos del Huesca en Tarragona. El Huracán hizo honor a su nombre y con tres casi consecutivas, evidenció la pérdida de concentración defensiva del Huesca y obligaron a Dani Jiménez a lucirse para evitar males mayores.
Los oscenses rebajaron pulsaciones con la entrada de Mérida, que incluso pudo anotar de disparo lejano, y de Gaspar. Frenaron así el ímpetu valenciano que había quemado naves dando entrada sus jugadores más ofensivos para evitar el empate final, que les deja tocados para el asalto final.
