En este sentido, Barrena dejó claro que pondrán como única condición para negociar que se plantee "un programa de izquierdas, claramente pensado para la mayoría social". Eso sí, puntualizó que IU también exigirá una mayor participación ciudadana y "que nadie quiera imponer su forma de sumar y lo decidamos entre todos".

Para el coordinador de IU-Aragón, su "obligación" es "ayudar a que cuajen esos gobiernos de progreso", del mismo modo que "es obligación de los que pueden sumar esfuerzos no hacer oídos sordos" a la ciudadanía, que "ha dicho que quiere cambio". Y argumentó que "no hay una fuerza política de la izquierda capaz de derrotar ella sola a la derecha", que "en esta tierra se llama PP y PAR". No citó a Ciudadanos, pero Álvaro Sanz reconoció que tampoco pueden coincidir con este partido "desde la perspectiva programática". Por ello, sus interlocutores serán PSOE, CHA y Podemos.

Adolfo Barrena advirtió de que tendrán muy en cuenta "qué responsabilidad asumen el resto de partidos para garantizar gobiernos de izquierdas" en plazas clave como la capital aragonesa, donde Zaragoza en Común, de la que forma parte de IU, aspira a hacerse con la alcaldía. En base a ello, el apoyo de IU "será recíproco en otros sitios", dijo. Y tras los "buenísimos" resultados municipales de esas candidaturas de confluencia, Álvaro Sanz apostó por seguir trabajando en proyectos de "unidad popular".