La Dirección General de Gestión Forestal advierte del riesgo de incendio derivado del episodio de temperaturas excepcionalmente altas para la época del año, acompañado de humedades relativas muy bajas en muchos puntos de la Comunidad. Este episodio comenzó el domingo 10 y se extenderá hasta el jueves 14 de mayo, alcanzando su cénit durante la jornada del miércoles, cuando las temperaturas es probable que superen los 35º-36º en el entorno del valle del Ebro.

A partir de la tarde-noche del jueves es previsible que se produzca un descenso notable de las temperaturas, a la par que el cierzo haga su aparición, con fuerza en las comarcas del valle del Ebro. En cuanto a las humedades relativas, registrarán valores bajos hasta el jueves en gran parte de Aragón (<30%), siendo especialmente desfavorables en áreas de la Ibérica occidental, donde en zonas próximas a Calatayud durante las jornadas del miércoles-jueves los valores de humedad podrían ser, incluso, inferiores al 10%. El episodio de calor culminará con fuertes vientos de poniente el jueves en el sur de Aragón y finalizará con una entrada de cierzo el viernes.

Debido a estas condiciones meteorológicas excepcionales, se considera que el riesgo de incendio se elevará de forma considerable durante este periodo. Tanto la prealerta de incendios forestales como el índice de riesgo por uso del fuego (índices de riesgo de incendio que elabora la DGGF), indican valores altos para la época en la que nos encontramos.

A pesar de encontrarnos en la parte central de la primavera, con la vegetación en buen estado hídrico gracias a que durante el mes de marzo se registraron abundantes precipitaciones en muchas localizaciones aragonesas, el mes de abril fue seco en Aragón y en los días transcurridos de este mes de mayo no ha caído precipitación alguna en muchas zonas y las temperaturas han estado por encima de lo que es normal.

Históricamente el mes de mayo tiene poca repercusión en la estadística de incendios forestales pero no debe olvidarse, que el año anterior (2014), que tras un inicio de primavera cálido y seco, mayo se convirtió en el mes del año con mayor número de incendios forestales.

Con estos condicionantes, desde la DGGF se solicita la colaboración ciudadana a través de la mayor precaución posible durante este periodo, especialmente con trabajos en el entorno rural que puedan generar igniciones. A pesar de que la orden anual de incendios permite durante el mes de mayo, con carácter excepcional, el uso del fuego para quema de residuos de poda de olivo y otras quemas fitosanitarias excepcionales previa obtención de la autorización correspondiente, se recomienda la no realización de dichas prácticas durante esta semana y realizar un seguimiento del índice de uso del fuego elaborado por la DGGF los días posteriores.