La candidata de IU a la Presidencia del Gobierno de Aragón, Patricia Luquin, considera necesaria una auditoría fiscal para cuantificar los beneficios que reciben las grandes empresas a través de bonificaciones, exenciones o cotizaciones.

Luquin, acompañada del número dos por Zaragoza a las Cortes, Jorge Sanz, ha comparecido ante los medios para presentar su programa fiscal, cuyo objetivo es lograr un reparto justo y equitativo de los tributos e impuestos.

Para ello, la candidatura de IU ha elegido la sede de la Agencia Tributaria de Zaragoza, ante la que ha denunciado los "agravios comparativos" que sufre la ciudadanía, que soporta el 90 % de la presión fiscal, y las pequeñas y medianas empresas, con un impuesto de sociedades del 15 % frente al 5 % de las grandes empresas y multinacionales.

Ha desmentido que en España se paguen muchos impuestos, ya que está 7 puntos por debajo de los que se afrontan en la Unión Europea y tampoco comparte que tenga que tener la misma presión fiscal que Bulgaria o Letonia, puesto que cuenta con unos servicios "mucho más potentes".

"No es verdad", ha dicho, que el PP haya bajado los impuestos porque "los ha subido con impuestos como el IVA" que implica que "pague lo mismo por el pan la señora Botin que una persona que cobre el Ingreso Aragonés de Inserción", ha incidido.

IU es partidaria de que "contribuya el que más tiene" y por eso defienden incrementar el último tramo del IRPF a partir de los 50.000 euros, el impuesto de depósitos bancarios, gravar a las grandes superficies y crear otros de carácter medioambiental.

Luquin ha subrayado que los impuestos son necesarios porque permiten más recursos e ingresos para tener unos servicios "potentes en educación y sanidad".

Según la candidata de IU, si las grandes empresas pagaran igual que el resto "se recaudarían más de 9.000 millones de euros" así como que la reforma que proponen significaría entre 150 y 160 millones de euros más por ejercicio, lo que hubiera equivalido a unos 600-700 millones más en esta legislatura.

Ha señalado que la última rebaja aprobada por el consejero de Hacienda, Javier Campoy, implica que para que el ciudadano disponga de 15 euros más el Ejecutivo pierde 25 millones de euros, mientras sigue soportando una elevada factura de la luz, copagos sanitarios y un aumento de las tasas universitarias, por lo que para Luquin "no compensa esta reforma fiscal".

Luquin insiste en su preocupación por la intención de la candidata del PP a la reelección como presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, de querer bajar los impuestos y de mantener bonificaciones fiscales que no repercuten en el beneficio de la mayoría de la ciudadanía.

Por su parte, Jorge Sanz ha apostado por dar prioridad a servicios esenciales como la sanidad y educación y se ha mostrado contrario a los conciertos con entidades privadas como el que se quiere llevar a cabo para construir el nuevo hospital de Alcañiz porque "lo único que esconde es que la parte pública pone el dinero y la privada se lo lleva".

Sanz ha abogado asimismo por "claridad en las cuentas" por lo que considera necesario que el Tribunal de Cuentas haga unos informes "claros y accesibles" para que lo pueda entender cualquier ciudadano.