Ana Cristina Placer, esposa de César Alierta, falleció este domingo en una clínica de Madrid, donde llevaba hospitalizada varios días a causa de una enfermedad pulmonar.

Mujer vitalista y discreta, era diplomada en Enfermería. Siempre estuvo muy próxima a su marido en sus tareas profesionales y en sus aficiones, como las nuevas tecnologías. Además, les unía el hecho de que ambos fueran originarios de Zaragoza, ciudad a la que siempre han estado muy ligados y donde han participado en numerosos actos públicos.

Con discreción, siempre fue un apoyo en la vida profesional de su marido, al que acompañó en múltiples viajes, como cuando en 2010 el presidente de Telefónica recibió la Medalla de Oro de la Américas Society.

En septiembre de 2012, al recibir el premio HERALDO a los Valores Humanos y el Conocimiento, César Alierta aprovechó la ocasión para agradecer el respaldo y la complicidad que siempre le ofreció su esposa. "Está en mi pasado, presente y futuro", dijo con emoción.

Los restos mortales de Placer han sido trasladados al tanatorio de Zaragoza. Está prevista una misa funeral en la Parroquia de Santiago en la capital aragonesa a las 12.30 de este lunes. 

El entierro tendrá lugar en la capital zaragozana este lunes por la tarde en la más estricta intimidad familiar.