Acusan a un joven por desarmar a un guardia, apuntarle a la cara y apretar varias veces el gatillo
El agente salvó la vida porque su atacante no montó la pistola
Los hechos ocurrieron en Tarazona cuando asistía a una maltratada
Durante el forcejeo, el marroquí Hicham B., que así fue identificado después este hombre, también intentó disparar contra un segundo guardia que participaba en el arresto. Pero este le dio un manotazo en el último momento y consiguió neutralizarle.
Por estos hechos, ocurridos en una vivienda de la calle Quiñones de Tarazona, la Fiscalía acaba de acusar al joven de una doble tentativa de homicidio, por la que pide para él 16 años de prisión.
Pero no son los únicos delitos que le imputa, ya que el detenido también profirió graves amenazas contra su compañera sentimental, que estaba embarazada.
"Me tienes que obedecer, porque yo soy el hombre; cuando nazca la niña la voy a coger y me voy a marchar con ella", le gritó a su pareja, a la par que golpeaba puertas y paredes con gran violencia. Por estos hechos, el ministerio público acusa también a Hicham B. al que defiende la letrada Carmen Sánchez Herrero de un delito de amenazas en el ámbito familiar con la agravante de reincidencia y solicita para él otro año de cárcel.
Pero la lista de delitos es todavía más larga, ya que el joven marroquí no se conformó con intentar acabar con la vida de los dos agentes que acudieron su casa a auxiliar a su compañera sentimental. De hecho, una vez trasladado a los calabozos del cuartel de la Guardia Civil de Tarazona, el maltratador volvió a atacar a otros dos funcionarios. A uno de ellos le pegó varios cabezazos en la nariz, causándole lesiones que le tuvieron cinco días de baja. Y al otro le lanzó varias patadas, alcanzándole en la parte interior del muslo.
Por este altercado la Fiscalía le acusa también de un delito de atentado en concurso con una falta de lesiones a sancionar con 600 euros de multa. Los hechos serán enjuiciados próximamente por la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Zaragoza.
Un vecino conflictivo y peligroso
Estuvo hospitalizada y tardó más de tres meses en recuperarse. La segunda víctima fue una señora de 61 años a la que, una hora más tarde, atacó por la espalda en la calle de Los Aires, causándole rotura de húmero.