Tercer Milenio

En colaboración con ITA

​El arzobispado de Zaragoza inicia una investigación para aclarar el supuesto caso de acoso

Manifesta su voluntad de aclarar la verdad de lo sucedido con total transparencia.

El arzobispado de Zaragoza ha iniciado una investigación sobre el supuesto acoso denunciado por el diácono Daniel Peruga contra el párroco de Épila, Miguel Ángel Barco, para determinar posibles responsabilidades al respecto.


Así lo ha manifestado en un comunicado la institución, en el que subraya su voluntad de aclarar la verdad de lo sucedido con total transparencia.


Tras la información publicada por HERALDO sobre la orden del Vaticano para sustituir al arzobispo Ureña tras el pago de una cuantiosa indemnización a Peruga, el arzobispado subraya que el diácono inició su vinculación con la archidiócesis de Zaragoza durante el curso 2006-2007, al ser admitido como seminarista y que en los primeros días de noviembre de este año, "solicitó por propia voluntad, a través de una instancia dirigida al Santo Padre, la pérdida del estado clerical y la dispensa de la obligación del celibato", aclara.


El arzobispado de Zaragoza confirma el pago extraordinario de 60.000 euros netos al diácono a través de la nómina del mes de noviembre y sostiene que "este es el único pago" realizado con sus fondos.


No aclara las razones por las que se le pagaron estos 60.000 euros, pero insiste en que el papa Francisco aceptó la renuncia de Manuel Urueña, al frente de esta diócesis, por motivos de salud.


Por su parte, el párroco del Épila presentó este miércoles por propia iniciativa una denuncia contra el joven por difamación.