Tras la cascada de accidentes de los últimos meses, el Ayuntamiento se ha decidido a cambiar de nuevo la regulación del cruce del paseo de Sagasta con la avenida de Goya y Tenor Fleta. En los últimos días se han tomado -y se van a tomar- nuevas medidas para evitar que los despistes de los conductores sigan provocando choques en este cruce, convertido en todo un punto negro dentro de la ciudad.

Desde que el Ayuntamiento retocara en marzo la configuración y la regulación semafórica del cruce, se han producido 19 accidentes, de los cuales 15 fueron porque los conductores no respetaron las señales. En 13 ocasiones se repitió la misma secuencia: los coches que circulaban por Tenor Fleta y querían seguir recto hacia la avenida de Goya veían que el semáforo del carril derecho, para poder girar hacia Sagasta, se ponía en verde. Los conductores daban por hecho que, como ocurría antes de los cambios, esa señal les afectaba también a ellos, cuando en realidad el semáforo seguía en rojo.

Esto ha provocado esos 13 choques, que se han ido sucediendo a pesar de que el Ayuntamiento ya tomó algunas medidas para mejorar la visibilidad de los semáforos. Principalmente se retrasaron las líneas de detención de los semáforos de Tenor Fleta y Goya, y se pintaron líneas continuas para separar los carriles para seguir recto o para girar. Como los choques continuaron, se instalaron dos grandes semáforos en el bulevar de Sagasta, reforzando aún más la información. Ni por esas. Un nuevo accidente ha hecho que el Ayuntamiento tome medidas más drásticas.

Desde el pasado viernes, todos los semáforos de Tenor Fleta para entrar en el cruce se ponen en verde al mismo tiempo. Esta unificación hace que los vehículos que giran a la derecha para entrar en el paseo de Sagasta pierdan 20 segundos del ciclo semafórico, por lo que la fluidez del tráfico -transporte público incluido- puede resentirse.

El otro punto que ha generado despistes en los conductores ha sido el giro a la izquierda desde el paseo de Sagasta hacia la avenida de Goya. Allí se han producido dos accidentes, el último de ellos, el pasado 11 de noviembre, de gravedad. Hubo dos heridos, y el conductor de un taxi tuvo que ser rescatado del interior de su vehículo por los Bomberos. El Ayuntamiento también ha tomado medidas para tratar de evitar los choques, y ha retrasado la ubicación del semáforo para hacerlo más visible a una mayor distancia.

Los otros cuatro accidentes que ha habido desde el cambio de diseño del cruce fueron por motivos diversos: un choche que se salió de la calzada, una bicicleta que atropelló a un peatón, un coche que arrolló a otra bicicleta cuando iba por el carril bici y un choque de un coche de la Policía Nacional que se saltó un semáforo.

Pese a todo, la concejal de Servicios Públicos, Carmen Dueso, dijo ayer que la responsabilidad de los accidentes es "de quien no cumple las normas". Aseguró que los cambios realizados en este punto "no son medidas caprichosas ni casuales", y que se hicieron "para evitar que los coches se quedaran cruzados y para proteger a los ciclistas", debido a la conexión ejecutada entre los carriles bici de Sagasta y Tenor Fleta. Dueso añadió que esta alta siniestralidad "no se podía prever", ya que se debe "a una grave falta de atención" por parte de los conductores. Pese a ello, anunció medidas para "mejorar la visibilidad".

El edil del PP Julio Calvo se interesó en por qué se han tomado las medidas "con tanta rapidez" tras el último accidente. "No han podido ser improvisadas, y hay que saber por qué no se hicieron antes", dijo.