Educación autoriza otros 35 centros bilingües entre críticas de padres y sindicatos

El próximo curso 233 colegios e institutos impartirán estos programas, cuyos cambios el pasado año siguen generando quejas

Más centros bilingües y más quejas por el modelo que Educación estrenó el pasado año. El Boletín Oficial de Aragón publicó ayer las 35 nuevas autorizaciones para el próximo curso, todas para impartir inglés salvo una de francés, con lo que el número total de colegios e institutos con clases en otro idioma asciende a 233, 154 de ellos públicos.


También son mayoría, 23 de los 35, los de titularidad autonómica entre las nuevas incorporaciones –en la lista hay diez institutos–, tras el aluvión de centros concertados que se produjo el año pasado, coincidiendo con la puesta en marcha del nuevo programa de bilingüismo. Así, se pasó de 3 concertados bilingües frente a 82 públicos en el curso 2012-2013, a más de 60 concertados entre los 198 que han sido bilingües este año.


Cuando se presentaron aquellas cifras y las nuevas condiciones, los colectivos de la escuela pública criticaron a la DGA por «favorecer» a la concertada. Y finalizado el primer curso de esta experiencia, las quejas se repiten, y se centran especialmente en que el actual sistema no garantiza la calidad de las enseñanzas en el idioma extranjero y a la falta de planificación y de recursos materiales y de formación del profesorado para desarrollar este ambicioso plan. 


Además de los nuevos centros, Educación ha autorizado un total de 18 modificaciones de la modalidad aprobada en su día para estos centros -la mayoría de los cambios se refieren a concertados–. Así, los públicos apuestan por adelantar a Infantil la implantación del programa y los de titularidad privada extienden el inglés a Secundaria.


Además, se han rechazado tres modificaciones y cuatro nuevas peticiones, bien por «falta de viabilidad organizativa y pedagógica del proyecto bilingüe» o porque el número de plazas de docentes disponibles con competencia para dar clases en otro idioma es insuficiente para el programa solicitado o no son idóneos para las materias que se van a impartir.


Por lo que respecta a los centros que ya impartían docencia en otra lengua, desde Educación recordaron que al inicio de curso Inspección revisará que tengan las plantillas necesarias. 

Pero las condiciones aplicadas desde el año pasado siguen sin convencer ni a los sindicatos ni a los padres de la escuela pública (Fapar), que coinciden en que no se garantiza un bilingüismo «de calidad». «Nuestra valoración es muy negativa, es un regalo para la concertada y la privada y a coste cero en la pública», señaló Miguel Morte, de CC.OO. «Es un popurrí donde vale todo y hay una diferencia tremenda entre los centros que acaban de empezar y los del programa del British Council». 


Uno de ellos es el colegio Sainz de Varanda de Zaragoza, del que el próximo curso saldrá la primera promoción bilingüe desde los 3 años. Allí llegan a dar el 40% del programa lectivo en inglés, frente al mínimo del 20% al que se han acogido la mayoría de los centros autorizados desde el año pasado, que pueden ser de inglés, educación física y música. «En esos tienen menos horas y en asignaturas donde no se trabaja tan bien el idioma como aquí, que se da ciencias, por ejemplo,», destaca Amalia Izquierdo, miembro del AMPA del Sainz de Varanda. Ahora se exige al profesorado el nivel B2, mientras que los del British hay profesores colaboradores con nivel nativo, que realizan cursos de formación anuales. En el resto, sindicatos y Fapar critican que «no hay formación y actualización» para los maestros. Y añaden que falta planificación para que los alumnos sean bilingües «de Infantil a Bachillerato».


Educación sostiene que el modelo «se planteó de forma que se sustentara en las plantillas fijas para evitar que los cambios de interinos pudieran condicionarlo».