El último de los foros de la jornada celebrada en la sede de la Caja Rural de Aragón el pasado martes 14 de noviembre llevó por título ‘Transparencia y sostenibilidad en la comunicación del sector porcino’. Sin duda, tal y como suscribieron en sus intervenciones los contertulios, dos de los conceptos más determinantes para marcar un nuevo rumbo en la comunicación e imagen de esta rama del sector primario, esencial para la economía autonómica y para la vertebración del territorio en la Comunidad.

Concretamente, Daniel Marsol, director de Comunicación, Marketing, Relaciones corporativas y RSC de bonÀrea Agrupa; Eduardo Costa, director de Producción en Piensos Costa y presidente del Clúster I+Porc; Sergio Samper, CEO de Grupo Jorge; y Gerardo Torralba, representante de Asaja en el Consejo de Protección de la Naturaleza de Aragón, fueron los encargados de abordar estas cuestiones, dirigidos por las preguntas planteadas por Santiago Mendive, subdirector de Información de HERALDO DE ARAGÓN.

La primera de ellas se detuvo en la política de sostenibilidad que debe coordinarse en toda la cadena productiva y en el modo en que esta se comunica al consumidor y a los agentes medioambientales. La respuesta del representante de bonÀrea Agrupa fue rotunda: "Nuestros 65 años de trayectoria actúan como aval de la sostenibilidad de nuestro modelo, si no fuéramos sostenibles no existiríamos»", y aludió a la génesis de la empresa en Guissona para explicar que la sostenibilidad está en su ADN. A continuación hizo referencia a la macroinversión de la compañía en Épila, que aspira a generar residuo cero, así como a apostar por uso del biogás, además de garantizar, como en el resto de sus instalaciones y explotaciones, la eficiencia en el uso del agua y de la energía.

Para el responsable del Clúster I+Porc, "el sector es sostenible por naturaleza", apostillando que el concepto traspasa lo medioambiental para llegar al ámbito rural: "Si no estuviéramos en el medio rural, estaría abandonado". Por otra parte, como director de Producción de Piensos Costa, señaló que "en el grupo estamos orgullosos de trabajar la economía circular de forma muy eficiente" y ejemplificó la notable evolución: "Tenemos animales con aire acondicionado, usamos la inteligencia artificial para optimizar su comida y su bebida y tenemos cisternas que analizan la composición del estiércol para derivarlo al terreno que lo necesite". Seguidamente añadió: "Un producto que estábamos desechando, hoy lo estamos utilizando, aportando valor a la Humanidad y alcanzando el residuo cero".

Aránzazu Navarro

El CEO de Grupo Jorge relató, por su parte, la iniciativa de la compañía para absorber un millón de toneladas de emisiones de dióxido de carbono al año, "lo que equivale a ocho veces el parque José Antonio Labordeta", con la plantación de más de 65.000 nogales y cerezos en Los Monegros. "Tenemos que esforzarnos en que se vea lo que hacemos. Vendemos el 60% de lo que se produce en España, lo que nos obliga a tener estándares internacionales de alta calidad".

Por su parte, el representante de Asaja no dudó en concluir que "el principal error que cometemos en el sector porcino es que siempre comunicamos a la defensiva, no comunicamos lo que hacemos bien pero nos defendemos cuando nos dicen que hacemos algo mal". Sin embargo, a su juicio, y midiendo las impresiones que confluyen en el Consejo de Protección de la Naturaleza de Aragón, "se ha ido templando la opinión general sobre el sector porcino y cada vez se reconoce más su importancia". A este respecto, destacó también la decisiva contribución de esta actividad empresarial para frenar la despoblación en el medio rural.

Un mensaje en construcción

Poniendo de relieve el valor económico y social del sector, el moderador quiso saber qué era lo que fallaba para que no llegara al consumidor final el mensaje adecuado. Eduardo Costa, director de Producción en Piensos Costa y presidente del Clúster I+Porc, fue el primero en tomar la palabra: "El sector está maduro y hay que dar el salto, por eso, después de la productividad, la eficiencia y la sostenibilidad, ha llegado el momento de comunicar". Y anunció: "Desde el clúster entendemos que es una labor muy importante, por eso estamos a punto de aprobar un plan estratégico de comunicación que sea un punto de inflexión en el sector".

Daniel Marsol, director de Comunicación, Marketing, Relaciones corporativas y RSC de bonÀrea Agrupa, se mostró de acuerdo con la afirmación: "Creo que la comunicación es una asignatura pendiente en el sector. Hay una dejadez de funciones, de manera que lo que no hacemos nosotros, lo hacen los que tienen visiones distintas de nuestra realidad". Marsoll también puso un ejemplo: "BonÀrea tiene una dirección central en su comunicación desde hace tan solo unos meses, lo que me parece una novedad relevante y muy indicativa del momento en el que estamos". Insistió en las bondades del sector que se deben comunicar: «"¿Hay algo más bonito que llenar las despensas de todos con productos de calidad?".

Mantener la calidad fue el primer requisito para garantizar una buena comunicación, según Sergio Samper, CEO de Grupo Jorge: "Hay que mantener los altos estándares de producción ganadera y alimentaria con las rigurosas transformaciones de su cadena de valor y sin conformarnos con lo que hemos hecho hasta ahora". Para ello, subrayó que hay que "fomentar que las estructuras productivas que se hayan quedado atrás den un paso adelante y si no que abandonen, porque a veces la singularidad es lo que más se queda".

Para Gerardo Torralba, representante de Asaja en el Consejo de Protección de la Naturaleza de Aragón, la comunicación la deben ejercer los profesionales y no los que trabajan en el sector productivo, aludiendo a la labor de este diario con su suplemento semanal Heraldo del Campo y, en concreto, a las páginas de este especial sobre el sector porcino. "Hay que lanzar un mensaje entendible y sencillo, como el ‘aeiou’, que parta del desconocimiento que existe del sector primario". A este respecto, distinguió entre la comunicación especializada y la que se tiene que dirigir al consumidor final.

Ya en el tramo final de la tertulia, y con el objeto de sacar pecho de esa importante evolución que ha experimentado el sector en los últimos años, el moderador Santiago Mendive sacó a colación el esfuerzo por aplicar las últimas tecnologías, como la inteligencia artificial. En este punto, el CEO de Grupo Jorge confirmó inmediatamente que la inversión en tecnología es obligatoria para ser eficiente: "La digitalización de una granja con datos de todo tipo que permite hacer predicciones de comportamiento muy interesantes. –No obstante, añadió– estamos intentando ver hasta qué punto lo que invertimos va a merecer la pena porque todo nuestro trabajo, al final, debe ser competitivo, porque todos tenemos que sacar un coste".

Para el presidente del Clúster I+Porc, la robótica y la domótica ya son una realidad en el sector porcino, "con casos de frustración y éxito como en todos los sectores". Eduardo Costa continuó su intervención asegurando que, en cualquier caso, "la inteligencia artificial es una herramienta muy potente". También se refirió a la importancia de atraer mano de obra al sector: "Si no conseguimos tener una reputación diferente a la que tenemos hoy, difícilmente vamos a poder contar con gente que quiera venir a nuestro sector".

En este punto intervino, seguidamente, Daniel Marsol, de bonÀrea Agrupa, quien añadió que además de atraer la mano de obra hay que retener la que ya se tiene: "Tenemos que hacer que nuestros equipos se sientan igual de orgullosos que siempre de trabajar en bonÀrea y que valoren lo que bonÀrea está aportando al medio rural".