Kate Middleton cobra protagonismo en la agenda de la Corona británica
La duquesa de Cambridge acompaña por sorpresa al príncipe Guillermo en el homenaje a las Fuerzas Armadas con motivo del Día de Anzac.
El príncipe Guillermo acudió ayer a la conmemoración del Día de Anzac, que honra a los caídos de las Fuerzas Armadas australianas y neozelandesas en la batalla de Galípoli, en 1915. A la cita asistió por sorpresa su esposa, Kate Middelton, que lució un abrigo de color crema, el mismo que utilizó para el bautizo de la princesa Charlotte en 2015.
En la solapa, no faltaba el alfiler de una amapola roja, una flor artificial que se ha utilizado desde 1921 para conmemorar a los militares que murieron en la guerra. El príncipe Guillermo depositó una corona de esta misma flor en el monumento The Cenotaph de Londres en nombre de la reina Isabel II. El año pasado fue la princesa Ana la protagonista de esta ceremonia.
Los duques de Cambridge vienen cobrando más relevancia en la agenda oficial, especialmente desde que se desató la pandemia del coronavirus y desde que en Palacio decidieron proteger a la monarca a la vista de su avanzada edad, manteniéndola confinada con solo unos pocos empleados que pasaron a formar parte de su séquito permanente.
En las últimas semanas esta protección se ha incrementado más si cabe, dado que la reina ha contraído la covid y, aunque la ha superado, su salud comienza a resentirse por el paso de los años. Además, Kate, a sus 40 años, está resultando ser un valor al alza y cada una de sus apariciones se observa al milímetro, a pesar de lo cual las críticas están siendo muy favorables.
Después del 'Megxit' y de las acusaciones sobre el príncipe Andrés, parece que los británicos están encantados con que el hijo mayor del príncipe Carlos y su mujer no se vean envueltos en ningún tipo de escándalo.
La pareja presenta una imagen idílica junto a sus tres hijos: George, de ocho años; Charlotte, que cumple siete el próximo 2 de mayo; y Louis, que este fin de semana ha celebrado su cuarto aniversario. De hecho, los niños también ocupan cada vez más espacio público. El pasado 29 de marzo, los mayores, George y Charlotte, que ocupan la tercera y la cuarta posición en la línea de sucesión al trono, acudieron con sus padres a la misa en recuerdo del duque de Edimburgo. Una semana después, estuvieron presentes en la tradicional misa de Pascua del Domingo de Resurrección, donde los duques de Cambridge fueron los auténticos protagonistas, en ausencia de la reina Isabel. En el jubileo de la monarca, que está previsto para el próximo 2 de junio, se ha tenido en cuenta la presencia de los pequeños, que acompañarán a la familia en el balcón del palacio de Buckingham.
