La tecnología no tiene fin y Google ha vuelto a sorprender a sus usuarios. La compañía ha lanzado un traductor de jeroglíficos basado en el aprendizaje automático que pretende revolucionar el uso y el estudio de la escritura de los escribas faraónicos.

'Fabricius' es el nombre de la nueva herramienta en homenaje al epigrafista y arqueólogo alemán Georg Fabricius (1516-1571) y ha sido lanzada esta semana coincidiendo con el aniversario del hallazgo a finales del siglo XVIII de la piedra Rosetta, un decreto escrito en jeroglífico, demótico y griego que permitió descifrar los jeroglíficos.

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