Cómo evitar que la ropa negra pierda color con los lavados

¿Qué ha sido del brillo y la intensidad del color negro de esos pantalones que tanto te gustaban cuando los compraste? Tras varios lavados, las prendas oscuras pierden su lustre original y su tono acaba más cerca del gris que del azabache. Además, las piezas de color oscuro, en todas sus versiones, son un básico de cualquier armario, lo que convierte su cuidado en un imprescindible. Para mantener la ropa negra en su estado óptimo y que siga pareciendo nueva tras los lavados, solo son necesarios seis sencillos pasos:

1. Por separado

A la hora de preparar la colada, la mejor opción es separar las prendas por gamas cromáticas evitando transferencias entre piezas y consiguiendo alargar la vida de su color. Para obtener el mejor resultado, lo recomendable es utilizar un producto de lavado específico para cada tipo de prendas.

2. Cremalleras y botones

Para evitar que dañen a otras prendas o que provoquen desgastes a causa del roce, lo ideal es cerrar las cremalleras y botones de cada una de las piezas.

3. Del revés

Un consejo para conseguir que la ropa mantenga durante más tiempo su color original es introducirla en la lavadora y la secadora siempre del revés.

4. Temperatura baja

Seleccionar un programa normal en la máquina, a baja temperatura, que no supere los 30 grados centígrados, y usar productos que favorezcan el fijado del color ayudará a lograr negros más intensos y brillantes.

5. Sin suavizante

Para evitar dejar rastros y manchas sobre las prendas, la mejor opción es no utilizar suavizantes.

6. No tender al sol

Tender la ropa oscura al sol puede producir la pérdida de su color y brillo original. Lo recomendable es ponerla a secar al aire libre y siempre del revés para proteger sus colores. Si se usa secadora, es aconsejable utilizarla a baja temperatura y, a la hora de planchar, hacerlo siempre del revés y sin exceso de calor.