Wismichu y Auronplay escenifican el abismo generacional en las Esquinas

El ‘New York Times’ dijo de Lola Flores: "No canta, no baila, no se la pierdan". Auronplay y Wismichu, los dos ‘youtubers’ que este fin de semana visitan el Teatro de las Esquinas de Zaragoza, tampoco bailan, ni son cantantes, ni humoristas, ni actores. Nada. Pero 2.000 personas no han querido perdérselo, llenando las cuatro sesiones que, entre este sábado y este domingo, ofrecen en la capital aragonesa.

No es, dicen los responsables del teatro, el espectáculo que más gente ha atraído de su historia, pero sí de los más exitosos y destacan como insólito que las entradas se agotaran en apenas unas horas.

Siguiendo en el terreno objetivo de las cifras, Auronplay, el alias en You Tube de Raúl Álvarez (26 años), tiene 1,3 millones de fans de sus críticas humorísticas a los vídeos que otros usuarios suben. Wismichu (Ismael Prego, 21 años) colecciona más de dos millones de seguidores, prendados de sus bromas telefónicas y ‘troleos’ (término que designa comentarios provocadores en internet).

A las cuatro de la tarde del sábado, una nutrida fila esperaba ya para entrar a la primera de las sesiones. Era un grupo de ‘privilegiados’ que iban a conocer a sus ídolos en persona, hacerse una foto con ellos (que podrían bajarse después de la página en Facebook de la organización) y plantearles preguntas ya en el patio de butacas. Para ello habían pagado 20 euros. Cinco más que los demás, que entrarían a la sala hora y media después.

De los allí presentes, se podía deducir que el de los ‘youtubers’ es un fenómeno que atrae por igual a chicos que a chicas. Y que trasciende gustos estéticos y tribus urbanas: había lacias melenas, pelos azules y las zapatillas blancas convivían con botas negras. Quedaba claro que lo que allí se ventilaba era algo generacional. Todos eran jovencísimos, la mayoría, incluso, menores de edad, los mismos que en Aragón tienen prohibido por ley asistir a un concierto en una sala.

"Me llenan"

Entre ellos estaba Pilar. Mañana cumplirá 12 años. Aún transida por haber tocado a sus ídolos, explicaba así por qué Auronplay y Wismichu significan tanto para ella: "Son perfectos. Te hacen reír en los momentos más difíciles. Me llenan". Al lado, otras dos chicas se secaban las lágrimas. La emoción era grande. Aunque hay que decir que la ‘fanaticada’ de estos ‘youtubers’ no se distingue por la histeria incontenida. Los seguidores aguardaron pacientemente, no hubo gritos. Sí algunos temblores, risillas azoradas y abrazos triunfales. "Estoy que no estoy", decía una niña en la fila. "¡Tía, que le he pisado!", confesaba otra, roja como un tomate tras su posado con los ‘youtubers’.

El humor que despliegan Wismichu y Auronplay está entre el primer argumento con los que los chavales intentaban dar explicación de su pasión. Así lo defendían Irene y Ana, de 15 y 18 años, respectivamente. "Nos hacen reír, hacen tontadas, pero dicen lo que pensamos y no nos atrevemos a decir". "Siguiéndoles también conoces mucha gente", añadieron.

Chus y Judith tienen ya 20 años. Es él quien tiró del carro para ir a la actuación. Y abundó en la idea: "Hacen vídeos críticos, con cosas que todo el mundo quiere decir y le da vergüenza". Reconocieron que a veces pueden ser groseros en su manera de expresarse, "pero es lo que vende". Celia, de 14 años, aportó más: "Nos gustan porque nos representan". "Están contra la tauromaquia, son feministas y vegetarianos", terció una amiga. Y aunque, a la par, dejaron caer que algunos de sus chistes pueden ser entendidos como racistas o machistas, lo interpretan como "humor negro". Tienen claro que Auronplay y Wismichu son personajes. Ismael y Raúl son reales.

Preguntas y respuestas

Ya dentro, Auronplay, Wismichu y Kajal Napalm (otro ‘youtuber’ que se unió al combo e hizo las veces de telonero), contestaron a las preguntas de los espectadores ‘vip’. "¿Preferíais vuestra vida antes de ser ‘youtubers’ o la de ahora?", inquirió una chica. "La de ahora", respondieron. "¿Qué te queda por hacer en tu canal?", le preguntaron a Wismichu. "Ahora voy a subir un vídeo en el que llevo una cosa por la cara que parece semen", contestó ante las carcajadas de la chavalería. Otras muchas cuestiones fueron de consumo interno, solo aptas para iniciados, como esta a Auronplay: "¿Puedes hacer lo de Stacy?". "¿Hay alguna tetona en la sala?", respondió el ‘youtuber’. Muchas más risas.

Y la brecha generacional se convirtió en abismo.