Tecnología

Tecnología aragonesa premiada en Londres

Los cinco alumnos participaron junto a su mentor en un concurso de programación en el que tuvieron que diseñar una aplicación en 48 horas.

La aplicación Food Quality permite votar la calidad de los productos.
Tecnología aragonesa premiada en Londres
FOOD QUALITY

Un grupo de estudiantes aragoneses ha conseguido el segundo premio del concurso de programadores a tiempo real de la Campus Party de Londres. Una aplicación que permite conocer el recorrido que ha hecho la carne antes de llegar a la cesta de la compra les ha proporcionado este reconocimiento.


César Álvarez, Alejandro Céspedes, Alberto Martín, Pepe Vila y Alberto Sanz son los cinco estudiantes con perfiles muy diferentes: hay informáticos, estudiantes de telecomunicaciones y un alumno de aeronáutica. Cuatro de ellos estudian en la Universidad de Zaragoza y uno en la Politécnica de Madrid, pero todos consiguieron una beca Talentum que desarrollan en Zaragoza, en la que realizan proyectos relacionados con la innovación tecnológica junto a su mentor, Enrique Mendoza.


El equipo recibió la invitación de la Campus Party Europe London 2013 para participar en ella. Una vez allí descubrieron la posibilidad de competir en el 'Ebbits Mobile Hackathon', un concurso de programación de aplicaciones móviles y no dudaron en apuntarse. Las reglas eran sencillas: tenían 48 horas para crear una aplicación relacionada con la trazabilidad de los alimentos.


"Nos repartimos el trabajo y las horas de sueño para que la aplicación estuviese en continuo desarrollo", explica el equipo de Food Quality. Para ellos, la clave de su éxito está en los perfiles diferenciados de su grupo, en el que tan solo el mentor había participado anteriormente en un concurso similar. Tan solo 48 horas después de comenzar el trabajo la aplicación estaba lista.


La aplicación, llamada 'Food Quality', es "usable ya en este momento, aunque faltan partes por desarrollar" y permite que al escanear el código QR que se incluiría en la etiqueta del producto con el móvil, se abra una página en la que se incluya la calificación del producto. Una nota numérica y otra expresada gráficamente con medallas (oro, plata, bronce... y en el peor de los casos, madera), que se obtiene a partir de un algoritmo que tiene en cuenta la puntuación de los usuarios, la vida del producto y también la vida del animal: su edad, dónde ha sido criado, las medicaciones que ha tomado, los datos del matadero..”, explican.


Recién llegados de Londres, todavía es pronto para hablar de una futura puesta en práctica de la aplicación, aunque “sería muy útil”, aseguran, que se convirtiera en una realidad. “Daría a los productos un valor añadido", afirman. Serían sus productores los que pagarían la aplicación, mientras que los usuarios podrían descargarla gratis tanto para iPhone como para terminales con un sistema operativo Android. Incluso han pensado ya en aplicaciones más allá de la carne. "Se podría utilizar también en cualquier producto, como por ejemplo el vino. Se podría cuantificar la calidad de una cosecha", aventuran.