Su perfil contiene las mejores cualidades de un empresario y de un científico. Bernat Ollé es lo que se podría denominar un emprendedor puro y quizá por ello no resida en España, sino en Estados Unidos; en concreto, en una de las mecas de la innovación tecnocientífica, Boston, ciudad que acoge instituciones como el Massachussetts Institute of Technology (MIT, donde Bernat se formó) o la Universidad de Harvard.

Ollé cruzó el charco para estudiar y, como les ocurre a muchos, ya no volvió. Reconoce que el ambiente emprendedor de la zona le enganchó. Allí, apunta, ser emprendedor es una opción válida, mientras que en España es algo aún minoritario.

"Cuando acabé la carrera -Ingeniería Química en la Universidad Rovira i Virgili- se me presentaban dos opciones: por un lado, trabajar en una planta y, por el otro, hacer el doctorado. Es lo que hace la mayoría, porque es lo que hay", recuerda cuando mira atrás, e insiste en la importancia de conocer otros emprendedores para poder tomar ese mismo camino y hacer lo propio. Bernat cree que salir del país siempre es bueno, aunque sea para ampliar miras.

Su experiencia fue mucho más allá y fundó varias empresas. Ahora, es uno de los directores de PureTech, una prometedora biotecnológica, que investiga la fabricación de fármacos que modulen el microbioma humano para acabar con enfermedades digestivas que actualmente tienen pocas opciones terapéuticas, como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn.

Esto es algo que se había intentado ya sin base científica, como es el caso de los famosos yogures funcionales.

Reconocimientos

Pero lo que se hace en su empresa sí tiene cabida, y mucha, en la ciencia y revistas como 'Nature' se han hecho eco ampliamente de su trabajo, que aún se sitúa en fase preclínica.

En un futuro, predice Bernat Ollé, "en el supermercado se encontrarán alimentos con propiedades farmacológicas y en las farmacias fármacos basados en organismos vivos".

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