Redactor jefe de Organización y Cierre de HERALDO DE ARAGÓN

Pequeños grandes líos

Protestas con cortes de caminos por vecinos de Paracuellos de la Ribera
Protestas con cortes de caminos por vecinos de Paracuellos de la Ribera
JMACIPE

Estamos rodeados de perturbadores conflictos internacionales y asistimos a una escena política nacional marcada por la crispación y los radicalismos. Una combinación que ensombrece cuestiones, como el acceso a la vivienda o al trabajo, que no por ordinarias son menos importantes. 

En la mayoría de las ocasiones los problemas de los ciudadanos se ciñen a cuestiones mucho más habituales y próximas que afectan a su día a día y que están ligadas a la prestación de servicios, como la sanidad, la educación o el transporte, por citar solo algunos ejemplos.

La actualidad aragonesa, no obstante, nos deja varios ejemplos de divergencias locales no resueltas que siguen preocupando, y mucho, a sus afectados, por pocos que sean. De norte a sur, nos pararemos primero un momento en el histórico litigio que desde el siglo XIX mantienen Ansó y Fago por la definición de sus respectivos términos municipales. El Tribunal Supremo reconoció en 2018 a Fago 28 kilómetros cuadrados –ahora solo tiene la superficie delimitada por su reducido casco urbano–, pero la fijación de sus nuevos lindes sigue pendiente.

En Huesca capital, la peña Alegría Laurentina ha organizado un concierto para socios el próximo sábado en el Jai Alai, su sede desde 1956. La peña sostiene que la licencia de apertura de 1942, localizada recientemente, permite una actividad, que sin embargo la alcaldía considera "ilegal". El Ayuntamiento cuestiona la validez de esa licencia y el aforo previsto (300 personas) y aduce que la ley de prevención y seguridad en materia de incendios "es muy taxativa". Hoy está previsto que los responsables políticos y técnicos municipales resuelvan al respecto.

Y más abajo, en Paracuellos de la Ribera, los vecinos denuncian que la fuente de este municipio de la Comunidad de Calatayud que manaba desde hace 500 años se secó en mayo del año pasado y lo achacan a las obras del trasvase del Jalón al río Grío para llenar el embalse de Mularroya. Continúan pendientes de que la Confederación Hidrográfica del Ebro les dé una solución y a la espera, se van a concentrar este próximo domingo.

(Puede consultar aquí todos los artículos escritos por Mariano Gállego en HERALDO)

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