La comedia de Zaragoza llora la muerte de José 'El niño': "Fue un humorista adelantado a su tiempo"
El humorista zaragozano, distanciado de los escenarios desde hace un tiempo, falleció la madrugada del viernes.
Las redes sociales se han inundado de mensajes en recuerdo a José ‘El Niño’. "Estamos bastante tristes", sentía Diego Peña, compañero de profesión y con quien tantas actuaciones compartió. "Se ha ido un referente cómico que le gustaba al público y a los compañeros", añade Peña, quien confiesa que le cuesta hablar en pasado.
José ‘El Niño’ formó parte de varios grupos de humor zaragozanos, como Monólogos para la Beneficencia y de Los Teloneros, lo que le llevó a actuar en numerosas salas de Zaragoza, e incluso de otras ciudades españolas. José Nogueras falleció en Extremadura, donde vivía en la actualidad, a causa de covid, que se contagió en el hospital donde se estaba tratando de una dolencia del pulmón.
"Tristeza absoluta al enterarme de la partida del pequeño enorme José ‘El Niño’, comediante singular, monologuista único, hilarante, tremendo cantor de tangos (de los apócrifos y de los que te parten el corazón), un jetón bárbaro con el que era imposible no desternillarse de risa los ratos que pasaras con él", publica Mariano Bartolomé en sus redes sociales.
"Era un cómico singular", recuerda Bartolomé, quien lo conocía desde los 12 años. "Era el típico amigo al que le hacíamos corro cuando hablaba y cuando entré en el mundo del humor ni dudé en decirle que viniera conmigo", añade.
"José se adelantó a su tiempo", coinciden Diego Peña y Juako Malavirgen, compañeros de carteles y escenarios y que le recuerdan con cariño. "Era un bufón, provocador, al filo… algo que a los cómicos nos encanta", reconoce Diego Peña, que recibió la llamada de su pareja este viernes.
“Creo que ni vos tuviste jamás la noción real del inconmensurable talento que tenías frente al micrófono”, ha añadido Bartolomé en una publicación de Facebook. “Su humor era superior, aunque una parte del público no lo apreciase porque no estaba preparado. Era inteligente y eso lo trasladaba a los escenarios”, señala Malavirgen. Una de sus virtudes más aplaudidas en el gremio era su trato con el público: "Bajaba donde estaba y, si algo se le ocurría, era incansable hasta que lo conseguía".
"Era divertido, le admirabas y te valoraba", añaden. Arena Rock, Juan Sebastian Bar o Sherlock Holmes fueron algunos de los bares donde Malavirgen compartió escenario con José. "Ha dejado un agujero muy grande", concluye Juako.
La pasada noche se reunieron algunos de sus amigos más cercanos y juntos recordaron algunos de los monólogos de ‘El Niño’. "Nos lo sabíamos de memoria, podíamos haber escrito sus guiones", aseguran. "Lo seguiremos recordando", concluía Diego Peña.
