El autor debuta con este libro, en el que narra en un extenso 'flash back' las peripecias de un personaje ficticio, Craso, en una época fundamental para el cristianismo, a caballo entre los siglos III y IV d.C.

Utilizando recursos habituales del exitoso género de la novela histórica, hace mover a su personaje en un periplo físico y emocional que le lleva desde Egipto y Bizancio hasta Hispania, pasando por un lugar que será fundamental en su vida, Carthago.

Allí aprende un oficio maravilloso para aquellos tiempos, el de copista. En su primera parte la novela se centra en explicar el arte de la escritura sobre papiro así como el descubrimiento de una nueva técnica como es la del pergamino.

El libro fluye como un relato entre aventurero y didáctico, ya que el lector constata enseguida la erudición del autor, que acierta a introducir una interesante información mezclada con una trama que bien se puede considerar como tradicional y que mantiene la atención constantemente.

En su parte final la acción se remansa, convirtiéndose en un relato más introspectivo, con abundantes referencias filosóficas y teológicas. El autor demuestra tener un amplio conocimiento de nuestra religión, y sobre todo de la historia del cristianismo.

Porque lo que en mi opinión hace de este libro una obra muy recomendable es la excelente aproximación que hace a aquel momento histórico, haciendo que comprendamos aquellas disquisiciones de los seguidores de Cristo, que pasaron de ser perseguidos a ser tolerados e incluso a influir en los avatares políticos del Imperio Romano.

Así, pues, lo que en un principio lleva al lector a pensar que se encuentra ante otra nueva novela histórica de corte aventurero, ciertamente entretenida, deriva poco a poco hacia otra cosa: un libro que se mueve entre el ensayo místico/religioso de tono ligero y la crónica de hechos fundamentales en la historia del cristianismo, no en balde desfilan por la narración varios sínodos y finalmente el fundamental concilio de Nicea, que marcó durante mucho tiempo el devenir de nuestra religión.

A mi modo de ver estamos ante una obra altamente recomendable para aquellos interesados en la Historia, con el aditamento de narrar una época no muy tratada en el género. Reúne dos cosas fundamentales para que un libro guste, la amenidad y la erudición. Quien suscribe ha aprendido algo leyéndolo. Estimo que no es cosa baladí.

LA FICHA

'El copista de Carthago'. Miguel Ángel Nievas. Ediciones Rialp. Madrid, 2022. 406 páginas.