Curro Fatás: "Quedarse callado es lo último que hay que hacer"

El minúsculo virus, ese ácido nucleico envuelto en sustancia lípida y rodeado por proteínas, continúa gravitando sobre nuestras vidas. Nos defendemos, lo estudiamos, lo atacamos. Curro Fatás, hasta le canta canciones. El que canta... el mal espanta.

Sí que se ha dado prisa en sacarle una canción a la pandemia.

He sido precoz en todo, hasta para nacer: soy sietemesino (sonríe). Nací en Tramacastilla de Tena, en Casa Borreguero. Soy infanzón, por nacer en casa blasonada, cosa que mis hermanos no... Mis abuelos ya veraneaban en el hotel Mariana. Allí, en Tramacastilla, creamos buena parte de las canciones de Puturrú de Fuá, menos ‘La toalla’, concebida a nivel del mar.

Sus canciones del coronavirus se llaman ‘Pandemónium’. Según la RAE, pandemónium significa capital del reino infernal.

Dejémonos de demonios. Se trata de una trilogía sobre el coronavirus, tres canciones con sus correspondientes vídeos. Ya están en mi canal de Youtube. Hablamos sobre el origen, el desarrollo de la pandemia y de la denominada ‘nueva normalidad’.

La primera canción de ‘Pandemónium’ se titula ‘Un murciélago, un pangolín y un chino’.

"Cómo es la vida, nos han cambiado nuestro destino...". Es una rumba hecha con la interacción de 14 personas.

¿Interacción de 14 personas en

pleno confinamiento? Currito...

Aclaro la interacción. Se trata del grupo de teatro De Nube o de Flor. Lo hicimos por teléfono móvil. Contamos también con el guitarrista Alonso Martínez, catedrático de Guitarra de Jazz en el Conservatorio de Pamplona.

Suena de lujo esa guitarra.

Ya lo creo. Me gusta toda la canción. Risto Mejide ya se ha hecho eco de ella en su programa. La segunda canción, ‘¿Coronavirus?’, es un viaje virtual, ofreciendo una visión crítica de la pandemia. "He cumplido los 60, y ya no les salgo a cuenta...", y varias ideas más a considerar.

El tercer tema pandemónico es a la vez un baile.

Y una soflama contra la manipulación. Hasta se olvidan de contar muertos... Humor socarrón, ‘El baile de la nueva normalidad’. "Ahora media vuelta, ahora mascarilla, codito con codito, lo dice el señor Illa...". Quedarse callado es lo último que hay que hacer. Lo estrenaremos este sábado, día 4, en Tarazona. Advierto: pasaremos la gorra para una entidad benéfica de Tarazona.

Tarazona, el Moncayo. Ahora mora allí.

Ya llevo un tiempo. Hace una década vine a Trasmoz. Allí elaboraba mermeladas, experiencia muy dulce. Ahora gestiono el castillo de Añón, lugar ideal para caballeros y damas andantes. Es un hospedaje medieval del siglo XII. Allí se detiene el tiempo junto al Moncayo.

El que no se detiene es usted.

La ilusión es el carburante de la vida. Y sí, comencé pronto, pero aún me queda energía. Recuerdo cuando subí por primera vez a un escenario, bailando en el Teatro Principal con Víctor Ullate. Tendría yo seis o siete años. Después me di cuenta de que lo mío era el teatro, con Mariano Cariñena, con Dionisio Sánchez, hasta que monté mi propio grupo, El Patito Feo de España. Un día invité a actuar al Dúo de No: Juan Manuel Labordeta y Pepe Gros.

¿Dúo de No? ¡Ja, ja, ja!

Una noche, en una buhardilla de San Pablo, escuchando un disco del grupo Les Luthiers, me dije que quería hacer algo así, pero en baturro.

Lo consiguió: ¡Puturrú de Fuá!

Empezamos en 1978. Hubo un lapso con Curroplastic. Del 83 al 91, en ocho años grabamos seis discos. Disco de oro en el 87, el grupo de humor más contratado. Actuamos en todas las capitales de provincia españolas. Decidimos parar. Volvimos con Leo Susana en 2007. En 2018 actuamos en nuestro 40 aniversario. La vida pasa pronto... Espero que no nos la amargue el coronavirus.