XIII CONCURSO DE RELATO BREVE DE HERALDO

La peonía y el rocío

Una peonía.
Una peonía.
Pixabay

Una mañana de primavera, una perla de rocío recién nacida preguntó a la peonía:

–¿Quién soy?

Y respondió la flor:

–Eres la pureza de esa pregunta que se evaporará sin respuesta.

Al rato, la gota ascendía al cielo como un querubín.

Y a media mañana, los rojos pétalos de la peonía se cocían en una infusión para calmar los nervios de una mujer que a diario soñaba con faunos y demonios.

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