La Real Sociedad Fotográfica de Zaragoza y el Centro Joaquín Roncal de la Fundación CAI-ASC conmemoran durante este mes de enero el aniversario de la caída del Muro de Berlín -el pasado 9 de noviembre se cumplieron 25 años- con una exposición fotográfica del artista berlinés Hermann Waldenburg, junto con un ciclo de documentales de la mano del Instituto Goethe.

Waldenburg mantiene una estrecha relación con la capital aragonesa desde que en 1979 expuso en la Galería de Arte Costa 3, gracias al empeño de Carlos Barboza y Teresa Grasa por mostrar su obra en Zaragoza.

Desde el 8 de enero y hasta el próximo 31 de enero, el Centro Joaquín Roncal acoge la muestra 'Arte en el Muro. Graffitis y objetos de arte en Berlín 1989-1994', una serie de fotografías sobre el Muro berlinés que Waldenburg captó durante cinco años, un trabajo que aporta, además de su valor artístico, un valor documental, ya que la gran mayoría de grafitis retratados han desaparecido.

La exposición se complemente con obras del colectivo POST, formado por Danjer, Chikita, Peroo, y Le Désert (uno de los organizadores del Festival de Arte Urbano Asalto) que han creado para la ocasión una serie de objetos urbanos reciclados que figuran junto a las fotos del muro de Berlín en su memoria, 25 años después.

"Nosotros somos el pueblo"

En la inauguración, que tuvo lugar este jueves, estuvo presente Hermann Waldenburg, acompañado del presidente de la Real Sociedad Fotográfica de Zaragoza Julio Sánchez Millán, los pintores y restauradores Carlos Barboza y Teresa Grasa, y Sergio Beltrán (Le Désert). 

Sánchez Millán señaló la necesidad de recordar el acontecimiento de la caída del Muro y los hechos que, previamente, llevaron a su construcción para que la historia no se repita porque "quedan otras guerras y otros muros levantados".

Waldenburg también se refirió a la efeméride como "la apertura del Muro. Una revolución del pueblo contra un régimen dictatorial" y rememoró la frase que comenzó a derribar fronteras en aquel tiempo: "Nosotros somos el pueblo" que supuso "una verdadera revolución sin derramar sangre", subrayó el artista berlinés.

La galería de arte más grande del mundo

Con el paso de los años, el telón de acero se fue transformando en un lienzo de hormigón armado de 150 kilómetros de longitud gracias a "un activismo que crecía como flores en un pasto por primavera". Pero la "galería de arte más grande del mundo no se estaba conservando como en un museo -apuntó Waldenburg-. Los grafitis desaparecían, muchas veces arrancadas para su venta como souvenir". 

En los 90 se decidió crear la East Side Gallery, un kilómetro y medio de muro al Este, junto al río Spree, en la que artistas de todo el mundo participaron con sus obras entre 1990 y 1994.

"Ahora ocurre lo mismo, también se llevan trozos de obras de artistas urbanos en diferentes ciudades -comentó Sergio Beltrán-. Por eso hay que elogiar la labor de Waldenburg y de personas como él, que se dedican a inmortalizar esas obras efímeras"

Este viernes, la sala Gil Marraco (19.30)  de la Real Sociedad Fotográfica de Zaragoza también inaugura una exposición de Hermann Waldenburg dentro de su Semana de Fotografía 2015, una ocasión única para disfrutar de sus fotografías personales.