Los Músicos de Su Alteza cumplen 25 años y lo celebran con un 'Orfeo' de Monteverdi

Interpretarán la ópera el viernes en Zaragoza, por primera vez en la historia. María Eugenia Boix, Víctor Cruz y Olalla Alemán cantarán los principales papeles.

Luis Antonio González –en una imagen de archivo–, en un ensayo de Los Músicos de su Alteza.
Los Músicos de Su Alteza cumplen 25 años y lo celebran con un 'Orfeo' de Monteverdi
J. M. Marco

"El ‘Orfeo’ de Monteverdi es una obra clave en la historia de la música porque supuso el pistoletazo de salida para la ópera. Y aún hoy, 410 años después de su estreno, sigue emocionando al público. Es una obra inmortal". Luis Antonio González, fundador y director de Los Músicos de su Alteza, lleva unos días de vértigo en los ensayos de su versión de esta obra, que pasado mañana se escuchará íntegra por vez primera en Zaragoza. "Es música extremadamente expresiva –subraya–, consigue tocar la fibra de las personas que la escuchan".

Los Músicos de Su Alteza son desde hace años una de las formaciones de referencia de la música antigua en España y en cierto modo abren ahora una nueva etapa: han sido elegidos para ser orquesta residente del Auditorio de Zaragoza. "Me alegra mucho haber entrado tras un concurso y no a dedo –destaca Luis Antonio González–, y en cierto sentido sí que se nos abre una nueva etapa. Hasta ahora hemos trabajado sin apenas subvenciones y con escasas ayudas, y la que se nos otorga ahora es modesta pero muy importante. Nos permitirá trabajar con más holgura y comodidad, tener una presencia más regular en el Auditorio de Zaragoza y disfrutar de sus infraestructuras".

Los recursos económicos

La falta de recursos económicos ha sido un freno para las ambiciones musicales del grupo, pero no para su calidad. "Nos hubiera gustado disfrutar de las ayudas públicas y privadas que tienen grupos europeos similares al nuestro, y que la música fuera tratada con mayor sensibilidad en materia fiscal". González es científico de la Institución Milá y Fontanals del CSIC y trabaja desde hace décadas en los archivos musicales del Cabildo y del Arzobispado de Zaragoza. Ese afán investigador es el que le llevó, hace 25 años, a crear Los Músicos de Su Alteza.

"Yo estoy en deuda con dos maestros, José Luis González Uriol y José Vicente González Valle –señala–. Y a ellos debo el interés por la investigación musicológica y por la interpretación con instrumentos históricos. Así, hubo un momento en que vi que la única manera de dar a conocer mi trabajo era creando un grupo. Y lo hice. La idea fue creciendo y consolidándose, hasta el punto de que todavía hay intérpretes que forman parte del grupo prácticamente desde sus primeros días (Pedro Reula, Pablo Prieto, Eduardo Fenoll, José Pizarro...) y otros que llevan numerosos años tocando en él, como Alfonso Sebastián, Sergio Franco, Juan Bernués, Juan Luis Arcos, o las sopranos Eugenia Boix y Olalla Alemán".

Pocos grupos musicales, y escasos proyectos culturales, cumplen 25 años en Aragón. El director de Los Músicos de Su Alteza echa la vista atrás y lo hace con satisfacción. "Uno nunca se imagina cómo va a ser el futuro. Algunas metas que tenía al principio se han cumplido, otras no exactamente. Ha sido un camino sin grandes sobresaltos y con algunos hitos que han supuesto un acicate para nosotros.

Hito fue, por ejemplo, que en 1996, apenas cuatro años después de su creación, ganaran el Concurso Internacional Van Wassenaer para conjuntos de música antigua (La Haya, 1996). "El premio no nos dio más conciertos, pero sí una disciplina y una dinámica de trabajo en la que continuamos hoy", señala. Hito, también, que en el 2000 la formación creara el festival de música antigua de la Capilla de Santa Isabel, momento además en que el grupo se amplió a orquesta barroca para enfrentarse a un repertorio mayor. E hito, por último, que en 2008 empezara a grabar con el prestigioso sello Alpha.

Ampliando el repertorio

"El futuro ya se escribirá. En los últimos años hemos empezado a dar cursos y a trabajar en la ‘cantera’, tanto en México como en España. En Los Músicos de Su Alteza tienen que convivir los profesionales con canas con los jóvenes llenos de entusiasmo y sabiduría –apunta el director de la formación–. Lo único que le pido al futuro es poder trabajar con algo más de holgura económica. Si lo conseguimos, podremos ampliar más el repertorio y abordar alguna gran obra a la que aún no hemos podido llegar, no por razones artísticas, sino por motivos económicos. Nos gustaría interpretar alguna de las ‘pasiones’ de Bach, oratorios de Haendel, las óperas tardías de Monteverdi... Y seguir rescatando elementos de nuestro patrimonio musical, que es enorme".

De hecho, uno de los proyectos que está acariciando el grupo es, cuando se cumplan 250 años de la muerte del compositor aragonés José de Nebra, en 2018, rescatar una ópera inédita y llevarla de gira al menos en concierto. "Queremos, también, avanzar en el tiempo –concluye Luis Antonio González–. La música antigua no se agota a mediados del siglo XVIII".

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