LITERATURA

Un Pinocho "más lúdico, alegre y fresco", en los pinceles de Saura

La hija del pintor reedita el libro que publicó en 1994 con Christine Nöstlinger.

Un Pinocho "más lúdico, alegre y fresco", en los pinceles de Saura
Un Pinocho "más lúdico, alegre y fresco", en los pinceles de Saura

Antonio Saura ilustró varios libros durante su vida, pero solo uno era de literatura infantil, 'El nuevo Pinocho', de Christine Nöstlinger, un personaje "desvalido y frágil" pero "sin miedo a nada", con el que se identificaba el pintor, según su hija Marina, que presentó ayer en Madrid una nueva edición.


Editado por la Fondation Archives Antonio Saura, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y Ediciones de la Central, este libro sale simultáneamente en cuatro idiomas (alemán, español, francés e inglés), algo "insólito", y viene con "una buena estrella".


Esa "luz", esa "buena estrella" que para Marina Saura ha guiado la nueva edición de este libro, tras agotarse la primera publicada en 1994 por Galaxia Gutenberg/Círculo de Lectores con el título de 'Las aventuras de Pinocho', ha hecho que el proyecto haya superado con éxito los muchos obstáculos encontrados por el camino.


Y los ha superado, con los mejores colaboradores y con el "apoyo" y "entusiasmo" de la propia Nöstlinger, a quien, "de todas las ilustraciones" que existen de su cuento, "las que más le gustan son las de Antonio Saura".


De los libros que ilustró Saura (Huesca, 1930-Cuenca, 1998), "ninguno por encargo" sino por expreso deseo suyo, este es el "más lúdico, alegre y fresco", lo que explica, en opinión de su hija, el "gran éxito" que tuvo y que se agotase "inmediatamente".


Cuando su padre muere deciden (las herederas, Marina Saura y Mercedes Beldarrain, su segunda esposa, y el albacea de su obra, Olivier Weber-Caflisch) que el 'Pinocho' es el primer libro que tienen que reeditar, por dos motivos: es "lúdico" y le dará a conocer "entre los jóvenes".


Doce años han pasado desde entonces, los necesarios para conseguir todos los derechos, contar con los mejores traductores -Miguel Sanz para la versión española-, el mejor impresor -el suizo Jean Genoud- y un diseñador gráfico "genial", Régis Tosetti, que ha propuesto "una nueva composición y una tipografía arriesgada", con tipos grandes al comienzo de cada capítulo para atrapar a los niños.


Un 'nacimiento' difícil

El resultado es, subraya Marina Saura, un libro "impecable", que aunque no es barato (49,50 euros) sí es accesible a muchos bolsillos, porque el reto es "llegar a los niños" y, por eso, las tapas son lavables, para que puedan "merendar con el Pinocho".


Otra característica que diferencia esta edición de la anterior es que es "mejor", al mostrar "todo el proceso de creación" y "devolver la textura, la variedad de las técnicas empleadas, la diferencia entre dibujos a línea, dibujos coloreados con tintas planas y pinturas sobre papel". "¡A mi padre le habría enloquecido!", afirma.


Y recuerda que este libro "nació de forma difícil" para su padre, quien tras la muerte de sus dos hijas menores -Ana y Elena, hermanas de Marina- había entrado en una "parálisis creativa". Fue el nacimiento de su único nieto, Pablo, hijo de Marina, que acaba de cumplir 18 años, lo que "le desbloqueó de esa tristeza".