PINTURA

Los bodegones toman las calles de Albarracín

Cincuenta pintores de toda España han participado en el XIV Curso de Pintura de Paisaje.

Los pintores se han lanzado a la calle para plasmar bodegones de lo más originales.
Los bodegones toman las calles de Albarracín
F. S. M.

Normalmente, los pintores que se dedican al bodegón eligen para pintar espacios cerrados, bien iluminados, pero alejados del bullicio y del ruido cotidiano. Pero eso ha cambiado durante esta semana en Albarracín, donde alrededor de cincuenta pintores se han lanzado a la calle para recoger en sus cuadros naturalezas muertas, en una iniciativa que se enmarca en la XIV edición del Curso Superior de Pintura de Paisaje que organiza la Fundación Santa María.


Estudiantes de Bellas Artes de las facultades de Madrid o Teruel, pintores recién licenciados de Cataluña, Valencia o Andalucía, y artistas consolidados de otros rincones de España, incluso de Canarias, han tomado durante esta semana Albarracín. En concreto, dos de sus emplazamientos más significativos, el patio de entrada de la Fundación Santa María y el patio del museo. Allí, a lo largo de cinco días, han plasmado en sus lienzos flores, frutas, muebles, telas o cualquier otro objeto que pueda formar parte de un bodegón.


"Un año más, la respuesta ha sido formidable porque los cursos se han convertido en un referente nacional. Después de catorce ediciones ya están muy afianzados gracias, sobre todo, al boca a boca. Además, este año hemos querido darle una vuelta y hemos sacado los bodegones a la calle, en una iniciativa muy original y pionera en España", apunta José María Rueda, director del curso. Junto a él han estado las pintoras y profesoras de Bellas Artes Paloma Peláez y Lourdes Castro.


Al igual que en ediciones anteriores, la parte práctica del curso, que consiste en sesiones de pintura, por la mañana y por la tarde, se ha completado con varias clases teóricas impartidas por expertos. En esta edición, los invitados han sido Manuel Parralo, catedrático de Pintura y decano de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid, y Wilfredo Rincón, investigador científico del Grupo de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC.


Exposición en Torre Blanca

Esta tarde, con los deberes ya hechos, los alumnos serán testigos de cómo parte de sus trabajos colgarán de las paredes de la sala de exposiciones de la Torre Blanca.


Se trata del mismo lugar en el que durante los últimos días han expuesto sus obras Prisca Jourdain y Pablo Caurel, los dos alumnos que el año pasado participaron en este curso y cuyos trabajos resultaron becados por la Fundación.


En 2011, el testigo lo recogerán los dos alumnos que esta tarde obtengan las becas de pintura, que llegan a su octava edición. Aunque para todos ellos, lo más importante ha sido disfrutar de lo que más les gusta, pintar, y poder hacerlo en un marco incomparable, Albarracín, y ante la atenta mirada de sus sorprendidos vecinos.