BEN HARPER

"La música es crecimiento... y dejarse llevar"

El intérprete californiano actúa hoy en Ranillas en el que es el concierto presentación del festival Luna Lunera, organizado por los ayuntamientos de Sos y de Zaragoza. Telonean Xavier Rudd y Loner.

Ben Harper, en un concierto reciente en Polonia.
"La música es crecimiento... y dejarse llevar"
A. WARZAWA/EFE

Usted es un músico con muchos seguidores entre sus compañeros de profesión. Es de suponer que eso halaga, pero quizá a veces le gustaría tener un mayor refrendo entre el público masivo...

Bueno, me encanta la música y respeto mucho a quienes las hacen y la aprecian. Creo que no lo hago mal, y el hecho de que muchos músicos me valoren es mejor que cualquier estatuilla.


Eli Paperboy Reed, Bela Fleck, Ben Harper... en la última década, España se está aficionando a una amplia variedad de sonidos facturados en suelo estadounidense, y no necesariamente relacionados con las listas de éxitos. ¿Le gusta que la gente tenga ahora la obligación de buscar más, dada la situación de la industria?

La verdad es que sí, de alguna manera ya no caen las cosas como antes, las recomendaciones son por palabra o correo electrónico o enlace a una web. Hay que ir más allá de lo obvio, de lo que "llega". Sobre los artistas que mencionas, Eli y Bela son geniales. Bela es amigo, un músico excepcional, y supongo que has escuchado a su banda.


Víctor Wooten al bajo es casi extraterrestre... El grupo ha estado en Zaragoza dos veces en el último lustro.

Sí, sí, todos ellos, pero Víctor es sin duda algo colosal.


Hablando de su grupo, Relentless 7 está lleno de músicos de Austin. La ciudad texana es muy musical, con ese festival South by Southwest al que acuden regularmente músicos españoles, y que pone la ciudad cabeza abajo cada año.

Austin siempre ha sido una ciudad musical, no hay más que ver la cantidad de grandes músicos que son de allí. Austin tiene alma. Su festival es muy divertido, se actúa en cada rincón, gente de todo el mundo, centenares de artistas de todo el mundo en una semana. Toco allí siempre que puedo.


¿Se ha llegado a cansar de tocar en directo sus mayores éxitos, como 'Steal My Kisses'?

No me canso de tocar ninguna de mis canciones, no las borro del repertorio jamás, pero a veces sí les doy descanso. La música es crecimiento, evolución y, sobre todo, dejarse llevar por el corazón. Cuando toco me entrego, no entiendo otra manera de hacerlo. Por eso disfruto con la versión que hacemos de 'Under Pressure' de Queen, por ejemplo. No puedo hacer un solo tipo de música, sería infeliz.


Usted ha comentado que le atrae la idea de hacer piezas clásicas de guitarra. ¿En quiénes se inspira?

De hecho, ya he trabajado en alguna pieza con una de mis Weissenborn y mostraré algo de esto en los conciertos. Me encanta Paco de Lucía, en flamenco y en sus experimentos clásicos, además de Julian Bream o el maestro Andrés Segovia, John Williams...


De una 'steel lap guitar' brota un sonido inconfundible, y la música de Ben Harper se nutre de ese factor. ¿Cuándo se enamoró de este tipo de guitarra?

Crecí en una tienda de música en el Este de Los Ángeles, pude escuchar muchos sonidos, y este fue el que más me gustó. Pero siempre ando buscando guitarras... de hecho, ahora en España voy a por una Ramírez, quiero visitar la fábrica en Madrid, pero si conoces algún buen luthier en Barcelona o Zaragoza, dímelo?


En Barcelona, además, se exhibe en el Museo de la Música la guitarra que hiciera Antonio de Torres a Llobet en 1859.

Conozco el trabajo de Torres. Ojalá tenga herederos que hayan continuado su tarea. Los buscaré. A los 18 años me vine con la mochila a recorrer Europa, conocí España haciendo autostop, y ya entonces compré una guitarra Ramírez. Me encanta la naturaleza y en este paseo por España quería ver cosas, pero no tengo mucho tiempo. Trataré de hacerlo antes del concierto de Santiago (por ayer). En Zaragoza casi no tendré tiempo. En ese viaje de juventud fui de Madrid a Sevilla y vi paisajes fantásticos. Me queda el resto para futuras visitas.