LIBROS

Julia Navarro cuenta la vida de una mujer ambigua que recorre el convulso siglo XX

Publica la novela 'Dime quién soy', (Plaza & Janés), de política, antihéroes y periodismo. "Es un libro, personal, de perdedores", dice.

Julia Navarro se confiesa lectora compulsiva y admiradora de Coetzee, Roth y David Grossman.
Julia Navarro cuenta la vida de una mujer ambigua que recorre el convulso siglo XX
LAURA URANGA

"El siglo XX es en el que más se ha matado, pero también es el siglo de muchas cosas positivas y de muchos inventos. Es el siglo de las mujeres, en el que hemos logrado la mayoría de edad, y además es el siglo en el que me he formado, en el que he crecido", señala Julia Navarro (Madrid, 1953). Explica que, tras "el éxito inesperado" de sus tres novelas anteriores, que han vendido "alrededor de cinco millones de ejemplares", quería dar un salto, "cambiar la forma de contar y también cambiar el modelo de novela". Así surgió 'Dime quién soy'.

Agrega la escritora y periodista que deseaba seguir creciendo, explorando registros, y decidió abrazar su tiempo y un período no muy lejano en "un viaje totalizador por el siglo XX": el de la caída de la II República, el de la Guerra Civil, la Segunda Guerra Mundial, la guerra fría y la caída del Muro de Berlín. Lo hace a través de un personaje enigmático, Amelia Garayoa Cuní, de la que apenas se sabía nada; por eso el joven periodista Guillermo recibe el encargo de escribir su vida.

"En la novela he querido rendir homenaje al periodismo y a la vez hacer una llamada de atención acerca del mal estado de la profesión. Ahora vivimos un periodismo de trinchera y camiseta, de intereses políticos y empresariales. Soy periodista, amo mi profesión, y he conocido muchos jóvenes compañeros como Guillermo, que trabajan en precario, que están mal pagados. No he roto el cordón umbilical con este oficio".

Julia Navarro, tras inventar a Amelia Garayoa, "que no era una santa ni tampoco un monstruo", se documentó minuciosamente, sobre todo a través de audiovisuales. "Y de repente me di cuenta de que me faltaba algo: me faltaban el tono, la atmósfera y la memoria personal de aquellas historias que se contaban en mi casa, cuando yo era joven y a las que entonces no les hacía mucho caso". Con todos estos elementos, Guillermo indaga en la historia de Amelia, nacida en 1917, lee su diario, y recompone su historia, de ciudad en ciudad, en clave de aventura.

Ecos de Ana Karenina

La novela está dividida en seis partes, que corresponden a los seis personajes masculinos principales del libro: el citado Guillermo; Santiago, el marido de Amelia, lo abandonará a él y a su hijo para irse con Pierre, "que encarna la revolución, una ideología concreta y la invitación a la libertad y a descubrir el mundo"; el cuarto hombre es el periodista norteamericano Albert James, fascinado por la Europa de entreguerras con "un punto de ingenuidad"; el médico Max, próximo al nazismo, es el quinto hombre y en ese instante Amelia se convierte en espía. Y la novela se cierra con Friedrich, que "es el hijo de Max; supone la recuperación del hijo abandonado años atrás".

Julia Navarro subraya que ha querido escribir una novela de "personajes reales, no de héroes ni de heroínas, personajes que están a pie de la realidad; son ambiguos, contradictorios, complejos, producto de una época de tensiones y totalitarismos". Amelia es "una mujer atormentada por el peso de la conciencia. Tiene una vida trágica. Podríamos decir que se parece a Ana Karenina, que no renunció a vivir", y un ejemplo claro de "la grandeza y la miseria que pueden tener los seres humanos. Es un libro de perdedores".

La escritora ha invertido "en esta obra tan mía" dos años y medio en su redacción: ha trabajado todos los días, vacaciones y festivos, de cuatro a ocho de la mañana, y de cuatro a ocho de la tarde.