LITERATURA

Los escritores latinoamericanos abogan por la ruptura de los géneros

La ruptura de los llamados géneros y subgéneros literarios ha sido la primera apuesta de los escritores que participan en la XXII Semana Negra de Gijón que este viernes se ha iniciado en la ciudad asturiana para desarrollarse hasta el próximo día 19. El festival literario tuvo un prólogo en Madrid, donde un grupo de autores se reunió en la Casa América para celebrar un coloquio, antes de que el llamado Tren Negro les trasladara a Gijón.


Raúl Argemí, escritor argentino afincado en Barcelona, fue muy radical al afirmar que "plantear el tema de los géneros es una antigualla absoluta". Considera que la novela no debe estar limitada por esas fronteras cuando "hasta los límites de los sexos se han roto; antes eran dos y ahora son tres o cuatro". En cuanto a las novelas, dice que "uno cuenta una historia, después alguien le pondrá las etiquetas".


El argentino Ernesto Mayo argumenta que "cómo no van a estar en crisis los géneros, si lo está toda la Humanidad, con un Papa, por ejemplo, que, en la lucha contra el sida, se pone de parte del virus", si bien cree que "lo que es malo para todo lo demás, es bueno para la literatura, que se nutre precisamente la situaciones derivadas de la crisis".


Discrepancias


Pero no todos tienen la misma opinión. El español Fernando Marías dice que "el desastre se avecina al mercado editorial, y serán los géneros los que salvarán a la literatura en las nuevas formas de contar. Nada mejor que recurrir a los géneros literarios cuando se derrumbe el mundo editorial, tal y como hoy lo conocemos".


Algunos creen que los géneros literarios son una invención ajena a los escritores. Eso es lo que piensa la escritora y editora española Mercedes Castro, quien afirma que "los escritores no los necesitan, son los jefes de márketing quienes recurren a ellos; es el aparato publicitario que rodea los libros, pero los escritores se limitan a contar su historia, no a clasificarla".


Una opinión similar es la del librero germano-mexicano Fritz Glockner. Asegura que "son los editores quienes han establecido la mercadotecnia de los géneros" y advierte que algunos libros se ven perjudicados por ello al figurar en estanterías de algún género en el que no deben ser encasillados y pierden lectores a quienes no les interesa precisamente la literatura de género.


Son algunas de las opiniones que se han escuchado en la 'Semana Negra', incluso antes de iniciarse, puesto que la 'Casa América' de Madrid acogió un 'prólogo' (así lo definió su director, Paco Ignacio Taibo II) que dará paso en los próximos diez días, ya en Gijón, a más de 130 mesas redondas y tertulias, con unos 400 libros que serán presentados o comentados a lo largo de esta edición.