ARQUITECTURA

Investigan la estabilidad del puente de Calatrava sobre el Gran Canal veneciano

La investigación que está realizando el fiscal adjunto de Venecia Carlo Mastelloni, de momento sin hipótesis de delito, se concentra en aclarar los posibles peligros de un derrumbe de la construcción, que se convertirá en el cuarto puente del Gran canal y unirá Plaza de Roma con la estación ferroviaria de Santa Lucía.

La Fiscalía de Venecia ha abierto una investigación para analizar los aspectos geológicos, necesarios para la estabilidad, del puente proyectado por el arquitecto español Santiago Calatrava en la ciudad de los canales, informaron los medios de comunicación locales.


La investigación que está realizando el fiscal adjunto de Venecia Carlo Mastelloni, de momento sin hipótesis de delito, se concentra en aclarar los posibles peligros de un derrumbe de la construcción, que se convertirá en el cuarto puente del Gran canal y unirá Plaza de Roma con la estación ferroviaria de Santa Lucía.


Los medios locales agregaron que no se excluye que la investigación se amplíe a otros aspectos como la realización, los costes, la elección de materiales, o la seguridad en la obra. Esta nueva noticia se une a los problemas y polémicas que está planteando la construcción del puente de Calatrava.


Desde el ayuntamiento de Venecia se destacó que "ninguna otra estructura está tan vigilada como el puente de Calatrava", ya que además de la Fiscalía también se está ocupando la Autoridad de Vigilancia sobre las Obras Públicas, el Tribunal de Cuentas, y una comisión municipal extraordinaria.

Doble coste


Los inspectores de la Autoridad de Vigilancia llegaron a Venecia en julio del 2006 debido a que el coste previsto de la realización del puente se había prácticamente doblado. Por esta misma razón, así como por el retraso para concluir la obra, el fiscal del Tribunal de Cuentas Carmine Scarano también ha abierto una investigación.


Además, cuando finalmente se termine, un equipo de técnicos tendrá que monitorizar las 24 horas del día y durante al menos cinco años los movimientos del puente, según confirmó el responsable de la obra por parte del Ayuntamiento de la ciudad, Salvatore Vento.


Según el ingeniero Vento, ya que la obra ha sido proyectada para moverse hasta cuatro centímetros, pero justo por ello, se han instalado ya una serie de sensores que registrarán cada mínimo movimiento de las bases y los comunicarán a un equipo de expertos.


Esta y otra serie de problemas han supuesto que del presupuesto de unos cinco millones de euros que se aprobó al inicio se haya llegado a los veinte millones de euros, según denuncia la oposición conservadora en el Ayuntamiento.


Las primeras dificultades en la construcción del puente comenzaron cuando se echó en falta un acceso para los minusválidos y se tuvo que improvisar un ascensor para que las sillas de ruedas pudieran acceder al puente.


Después, el mismo Calatrava tuvo que intervenir y calificar de "falsas" las afirmaciones sobre que su creación dañaría las orillas de los canales sobre las que se asienta, como publicó la prensa local.


La inauguración del puente, que se esperaba para antes del histórico carnaval veneciano, sigue retrasándose y aún no tiene fecha y tampoco un nombre.


El puente de Calatrava, el primero que se construye después de 125 años en esta ciudad, será el cuarto del Gran Canal, junto a los de Rialto, Accademia y Scalzi.