"Son mosquitos incansables que mortifican a las personas". Así define el alcalde de Pozuelo de Calatrava (Ciudad Real), Julián Muñoz Sánchez, el calvario que viven sus vecinos con la plaga de mosquitos que están sufriendo. "Parecen pájaros más que mosquitos; no puedes salir a tomar el fresco por la tarde porque te comen", comenta otro paisano de este pueblo de 3.000 habitantes.

Los mosquitos han elegido como hogar la laguna del Prado, que otros años se secaba en el mes de junio. Sin embargo, las abundantes lluvias del invierno y la primavera han resucitado esta reserva natural e incluso una colonia de 44 flamencos habita en ella este verano. Flamencos a los que parece no importarles la presencia de tantos mosquitos que, incluso, han sobrevivido a seis fumigaciones de 'Vectobac', un insecticida larvicida biológico inocuo para el hombre y la fauna terrestre y acuática y, al parecer, también para los mosquitos.

Mientras el ayuntamiento busca otras soluciones, los pozoleños se resignan a esperar el final del verano y a utilizar todo tipo de repelentes y remedios -pulseras y parches- para luchar contra esta plaga.