PEDRO SANZ, PRESIDENTE DE LA RIOJA

"Es importante para el Valle del Ebro aunar esfuerzos y proyectos"

Es uno de los barones con más peso en el PP. Apuesta por la unidad de cuenca y por cerrar ya el proceso autonómico.

Pedro Sanz Alonso, presidente del Gobierno de La Rioja, durante la entrevista.
"Es importante para el Valle del Ebro aunar esfuerzos y proyectos"
CARLOS MONCíN

Los problemas del agua son comunes a todas las comunidades del Ebro. Aragón tiene un nuevo conflicto con Cataluña. ¿Cuál es su opinión?

Me gustaría poner cierta cordura con estos asuntos, que también afectan a La Rioja. Estamos en el siglo XXI y hay que superar ya ciertas cuestiones. El agua es patrimonio de todos los españoles y más cuando un río atraviesa varias comunidades. Hay que defender la unidad de cuenca. Pero estamos ante un Gobierno central que deja hacer, que no sabe poner coto a determinados planteamientos de algunos territorios. Cuando un Ejecutivo nacional pasa de poner barreras, da pie a enfrentamientos. Nunca se había llegado al nivel de conflictos entre Autonomías como el que tenemos con Rodríguez Zapatero.

Pero La Rioja recurrió el Estatuto de Aragón por la reserva hídrica.

Es que Aragón también ha cometido errores con el agua en su Estatuto, con la reserva hídrica. Todos podíamos plantear reservas, pero hay que se coherentes y poner los pies en el suelo. A nadie le debe faltar agua y por lo tanto es necesario que se administre adecuadamente. Hay que poner cordura.

¿Usted cree que la cuenca puede aguantar un trasvase al Levante de más de 1.200 hectómetros cúbicos, como reclama el PP?

Si a mí me dicen que van a poner un tubo en La Rioja para llevarse el agua, les digo que nada de nada. Ahora, el agua que pasa de Alfaro para abajo, a mí me da igual.

¿No es contradictorio lo que acaba de decir con lo que ha dicho antes sobre la unidad de cuenca y Aragón?

La unidad de cuenca tiene que garantizar el consumo, el uso y las necesidades de todas las Autonomías del Ebro. Pero con el agua sobrante, la que se pierde en el mar, se puede aprovechar para otros. Eso no rompe la unidad de cuenca. Hay que garantizar a cada territorio su agua, pero si sobra, no la tiremos. Es como si yo me quejo de por qué el Ebro se identifica con Aragón y no se hace con La Rioja, Cantabria o Navarra. Todos formamos parte de la misma de cuenca.

En Aragón, con la reserva hídrica se ha querido garantizar precisamente el uso y cubrir las necesidades de desarrollo.

¿Y si los riojanos hacemos una reserva hídrica muy superior y no permitimos entonces que bajan caudales suficientes? ¿Qué pasaría? ¿Quién controla eso? Por ejemplo, también lo pueden hacer los cántabros o que cada uno pusiera lo que le diera la gana. Entonces no habrías límites y sería ingobernable. Por eso pedimos que alguien ponga orden y límites. Eso es respetar la unidad de cuenca, que debe ser asegurada por el Gobierno español.

La Rioja también recurrió las ayudas fiscales del País Vasco para las empresas, ¿por qué?

Primero, no estoy en contra del concierto económico, eso que quede claro. El concierto, el régimen foral y el sistema común son perfectamente compatibles. El recurso es por que durante treinta y dos años las normas que dictaban las diputaciones forales podían ser recurridas por los agentes económicos y sociales y por La Rioja si entendíamos que sobrepasaban los límites de la legislación nacional o comunitaria. De repente, bloquean esa posibilidad. Eso es lo que hemos recurrido, tener la libertad de reclamar por vía judicial. Han dado rango de ley a las normas de las diputaciones forales del País Vasco, en lugar de administrativa. Zapatero lo aceptó para pactar con el PNV los presupuestos generales del Estado. Por siete votos se le quitó a La Rioja la capacidad defensa legal.

Volviendo al Ebro, tanto usted como los presidentes de Aragón y de Navarra defiende el concepto del Valle del Ebro como un espacio común de desarrollo.

La asignatura pendiente que queda en el Estado autonómico, independientemente de que hay que acotar ya el marco competencial y cerrar el proceso, es la colaboración y la cooperación entre territorios por encima de colores políticos. Eso todavía no se supera. Intentamos colaborar, pero nos condiciona un tanto el color político de cada uno. En eso deberíamos de cambiar. Con Aragón hemos firmado seis acuerdos importantes, así como conjuntamente con Navarra.

¿En qué ámbitos?

Además de la Universidad para lograr el campus de excelencia, hemos suscrito acuerdos para la denominación común del espárrago, varios en sanidad (investigación y asistencia), en industria, en diseño, en servicios sociales, todo lo relacionado con la industria agroalimentaria. Los encuentros con el presidente Iglesias, tanto en Logroño como en Zaragoza, han sido significativos. El Ebro une a territorios y también a personas, y tenemos claro que es un instrumento de desarrollo económico que debemos potenciar por encima de intereses particulares.

¿Es partidario de pedir una Eurorregión del Valle del Ebro?

No se trata de crear un organismo. Lo importante es aunar esfuerzos en cuestiones comunes de vital importancia, como hemos hecho con la excelencia universitaria. Hay que seguir buscando puntos de encuentro y de colaboración de forma natural, lo del nombre es lo de menos. Es más importante la eficacia que aparentar soberanismos fuera de lugar, como pasa con Cataluña.

¿Y cómo se compatibilizan los aspectos competenciales y propios con el conjunto del Estado?

El Estado autonómico es quizás uno de los mejores valores que tenemos los españoles, que ha permitido fortalecer la pluralidad y la diversidad. Pero también ha tenido efectos negativos cuando algunos han confundido la descentralización y el reconocimiento de lo propio con la posibilidad de plantear una soberanía de igual a igual con España. Y eso es un grave error. Es imprescindible que PSOE y PP definan y cierren de una vez el marco y el proceso autonómico. Así quedará claro que en España hay normas comunes.