BRONCA POLÍTICA ENTRE PP Y PSOE

El 'Alakrana' destapa la caja de los truenos en el Congreso

Rajoy critica al Gobieno en una de sus intervenciones
El 'Alakrana' destapa la caja de los truenos en el Congreso
EFE

Mientras los tripulantes del "Alakrana" regresan libres a España, en el Congreso de los Diputados se ha organizado una bronca monumental entre el Gobierno y la oposición, con varios frentes abiertos al mismo tiempo, cuyo alcance no se veía en la Cámara Baja desde hace mucho tiempo.


En la sesión de control el presidente José Luis Rodríguez Zapatero no ha hablado del secuestro del atunero, porque la pregunta del líder del PP, Mariano Rajoy, versaba sobre economía y sólo ha servido para confirmar que el jefe del Gobierno sigue siendo mucho más optimista que su oponente al interpretar los datos económicos.


Así que ha sido la portavoz del grupo popular, Soraya Sáenz de Santamaría, la encargada de sacar a la palestra el caso del "Alakrana", en su pregunta a la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, que coordina el gabinete de crisis montado por el Gobierno para hacer frente al secuestro.


Como los marineros ya no corren peligro, la portavoz del PP no ha ahorrado críticas a su gestión, a su juicio el "mayor fracaso político de toda su carrera", poniendo especial énfasis en su viaje a Argentina mientras el "Alakrana" seguía en manos piratas.


Tampoco se ha cortado la vicepresidenta en su respuesta y tras reprochar al PP que intente sacar "rédito electoral" del caso ha pronunciado unas palabras que han retumbado con especial eco en el hemiciclo: "Todo vale para ustedes; si ahora hay que ponerse del lado de los piratas, pues también, porque todo vale, excepto ayudar a construir".


Aunque Rajoy no habló del "Alakrana" dentro del pleno, sí lo ha hecho fuera, y bien alto y fuerte, en una rueda de prensa.


"Incompetencia, improvisación y soberbia", han sidos los términos con los que ha resumido el papel el Gobierno.


Ni un sólo reconocimiento le ha dedicado, y sí un aluvión de críticas que ha culminado con la petición de la reprobación de Fernández de la Vega y de los ministros de Defensa, Carme Chacón, y Justicia, Francisco Caamaño.


No le ha valido que la vicepresidenta haya anunciado que va a dar explicaciones en el pleno, según él tiene que ser el propio Zapatero quien hable, como máximo responsable de una gestión que "antes, durante y después" del secuestro ha sido "pésima".


El PP no ha olvidado las palabras de De la Vega, y Soraya Sáenz de Santamaría ha pedido después su retirada porque equivalen a acusar a su partido de "ponerse del lado de los piratas", esto es, algo "vil" y "deleznable", según ha proclamado en el hemiciclo.


Y por si fuera poco, en el Salón de Pasos Perdidos ha tenido lugar una tensa escena cuyos detalles van a dar mucho que hablar, protagonizada por el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el diputado del PP Carlos Floriano, quienes se habían enfrentado previamente en el pleno por una pregunta parlamentaria.


No se sabe si ha sido por el ambiente ya caldeado durante la mañana o porque los ataques del PP por el sistema de escuchas SITEL está colmando la paciencia del ministro, el caso es que ambos se han enzarzado en una agria discusión que llegó a subir bastante de tono.


Según Floriano, Rubalcaba le amenazó, con el diputado del PP Esteban González Pons al lado, en los siguientes términos: "Escucho todo lo que dices y veo todo lo que haces", un tono amenazante que le llevó a exigir la dimisión del ministro.


La versión de Rubalcaba es otra, porque esa supuesta "amenaza" a Floriano no fue según él más que un recordatorio de que "escuchaba y veía" en la radio y la televisión todas sus acusaciones sobre la presunta ilegalidad de las escuchas efectuadas con el Sitel.


Pocos testigos ha habido, pero quienes vieron algo aseguran que el propio presidente del Congreso, José Bono, al pasar por el Salón de Conferencias se llevó a Rubalcaba para evitar que la cosa fuera a mayores. Bono, sin embargo, asegura que habían quedado a tomar un café.