La ministra de Hacienda condena la agresión a dos agentes de Vigilancia Aduanera
Fueron apedreados por un grupo de contrabandistas de tabaco en una playa de Gibraltar.
La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, ha condenado la agresión que sufrieron en la madrugada de ayer dos agentes de Vigilancia Aduanera que fueron apedreados por un grupo de contrabandistas de tabaco en una playa de Gibraltar.
El Servicio de Vigilancia Aduanera, dependiente de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) "va a denunciar lo ocurrido", ha asegurado la ministra en Cádiz.
Montero ha lamentado que se haya atacado a "magníficos profesionales que se juegan la vida en el desarrollo de sus tareas" y ha criticado que sean "dianas" de agresiones cuando "están trabajando por el interés general".
La ministra ha insistido en pedir "respeto" a los funcionarios y a su "dignidad" y ha deseado la pronta recuperación de los dos agentes heridos.
Ambos se encuentran ya en su casa, uno con fractura de tabique nasal y otro, que fue hospitalizado, a la espera de una intervención quirúrgica para atender las fracturas en pómulo y tabique nasal que le causaron las pedradas.
Los dos resultaron heridos sobre las 5.00 horas de ayer, cuando a la embarcación en la que viajaban, auxiliar de un patrullero del Servicio de Vigilancia Aduanera, se le paró el motor durante una persecución de una lancha neumática de contrabandistas de tabaco en la costa de levante de La Línea de la Concepción (Cádiz).
El estado de la mar y la inercia hizo que la lancha de los agentes quedara varada en la playa de Levante del Peñón.
En ese momento, los dos funcionarios de Vigilancia Aduanera que ocupaban la embarcación auxiliar comenzaron a ser agredidos por un grupo de personas que, en actitud violenta, comenzaron a lanzarles piedras de gran tamaño, algunas de más de veinte centímetros, según las mismas fuentes.
Mientras les agredían, los contrabandistas se acercaron a la embarcación de los agentes y se apoderaron de los paquetes con tabaco de contrabando que habían incautado en el mar, según han indicado a EFE fuentes próximas a la investigación.
El incidente se produjo en un momento en el que los contrabandistas de tabaco habían tenido que regresar a Gibraltar con sus cargamentos de tabaco, ya que veían presencia policial en la costa de La Línea y no podían completar su viaje.
"Si los agentes no hubieran llevado casco podría haber pasado una desgracia mayor", han comentado las mismas fuentes.
Sin recibir ayuda, los dos agentes heridos consiguieron finalmente reflotar la embarcación y llegar a remo hasta el patrullero.
