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Un brigadista, tras la muerte de un compañero en Zamora: "Se veía venir"
Ignacio Arroyo, que ha asistido a la concentración silenciosa celebrada por la muerte de otro profesional, ha lamentado la falta de medios de extinción disponibles ante los incendios de los últimos días.
Un brigadista de una de las cuadrillas helitransportadas que interviene en el incendio forestal de Losacio (Zamora) ha asegurado tras la muerte de un compañero y un ganadero en ese fuego y la atención sanitaria recibida por otras trece personas que lo sucedido "se veía venir".
El integrante de la cuadrilla helitransportada de Villaralbo (Zamora) Ignacio Arroyo, que ha asistido a la concentración silenciosa celebrada en Zamora por la muerte de su compañero, ha declarado que las altas temperaturas, la gestión de la Junta, los pocos medios que hay y el hecho de que los montes estén "todos sucios" hacían prever lo ocurrido.
Ha lamentado la falta de medios de extinción disponibles ante los incendios de los últimos días, lo que hace que los integrantes del operativo estén "muy cansados porque van de un incendio a otro sin descanso".
Por ello, ha considerado que las prisas y la falta de previsión han podido influir en el suceso en el que ha perdido la vida su compañero.
Aunque no conocía personalmente al manguerista de una autobomba fallecido en el incendio, sí que ha considerado que seguramente haya coincidido con él en las labores de extinción de otros incendios.
Ha explicado además que los equipos de las autobombas únicamente están compuestos por dos efectivos de extinción, uno que conduce el vehículo y da el agua y el otro, el manguerista, que va como "punta de lanza".
Ha agregado que en los incendios las autobombas suelen unirse a otras cuadrillas de tierra, denominadas "romeos", o helitransportadas para afrontar la lucha contra el fuego allí donde determinan los responsables del operativo de extinción.
