sucesos
Hallan una cabeza humana dentro de una caja en Castro Urdiales
La Guardia Civil ha detenido a la novia del hombre al que pertenece la cabeza hallada en una vivienda en Castro Urdiales en la madrugada del viernes al sábado.
La Guardia Civil ha detenido a la novida del hombre al que pertenece la cabeza humana, que apareció dentro de una caja en una vivienda en Castro Urdiales (Cantabria) la madrugada del viernes al sábado. Según informa 'El Diario Montañés', el fallecido es un vecino de Castro de 67 años que desapareció en febrero pasado.
La detención de su compañera sentimental se produjo este fin de semana, después de que una mujer encontrara la cabeza en su casa, según han informado fuentes del Cuerpo.
La Guardia Civil no ha dado más datos sobre la persona detenida, y las actuaciones se encuentran bajo secreto de sumario.
Del caso se ha hecho cargo el Juzgado de Instrucción número 2 de Castro Urdiales, que se encontraba de guardia cuando sucedieron los hechos. El mismo sábado incoó diligencias y declaró el secreto de las actuaciones.
Según la información que ha trascendido por el momento, una mujer encontró la cabeza al abrir una caja que le habían entregado cuando se encontraba en su casa, una vivienda de la calle Santa Ana de Castro Urdiales. Al parecer, fue la pareja sentimental del fallecido quien le dio la caja con el craneo.
Tras el hallazgo, la mujer tuvo que ser atendida por servicios sanitarios del 061, que la trasladaron en ambulancia al centro de salud Cotolino de Castro Urdiales.
La Guardia Civil no ha concretado en qué estado se encontraba la cabeza ni la identidad de la víctima, que investiga el Instituto Armado.
La investigación sigue abierta y el grupo de delitos contra las personas de la Guardia Civil de Cantabria cuenta para ello con apoyo de especialistas de este Cuerpo de madrid.
Fuentes de la Guardia Civil han confirmado que la cabeza la encontró una mujer en la madrugada del viernes al sábado y que se está tratando de identificar a quién pertenece. La vivienda se encuentra en la calle Santa Ana, al norte de Castro Urdiales y cerca de la plaza de toros.
Según recoge este lunes el Diario Montañés, la caja podría haber llegado a manos de la mujer a través de una amiga y que tras un par de días la abrió por el fuerte hedor que desprendía.
