El Rey, animado y con buen aspecto, ha recibido a los nuevos representantes diplomáticos de Marruecos, República Checa, Omán, Tailandia, Indonesia y Malasia en el Palacio Real, recuperado después de más de un año como escenario de la presentación de cartas credenciales de embajadores extranjeros.

Durante esta ceremonia, don Juan Carlos ha utilizado su bastón para caminar, pero ha prescindido de él para recibir de pie a cada uno de los nuevos embajadores, con quienes ha comentado en tono distendido los avances en su recuperación física, que le han permitido esta semana reducir de dos a una las sesiones diarias de rehabilitación.

"Dentro de poco, estaré corriendo", ha bromeado con la representante diplomática de Omán, Kifaya Jamis Miyah al Raisi, en respuesta a una pregunta suya sobre este proceso de recuperación, y ha contestado también al interés mostrado por el embajador marroquí, Mohamed Fadel Benyaich, con una respuesta en la que ha explicado que se encuentra mejor, "a base de mucho esfuerzo diario".

La última vez que se celebró en el Palacio Real esta vistosa ceremonia fue en febrero del año pasado, pero el proceso de recuperación de la operación de doble hernia discal a que se sometió en marzo y la posterior infección en la cadera izquierda aconsejó trasladar provisionalmente la presentación de nuevos embajadores al Palacio de la Zarzuela, con un protocolo simplificado.

Hoy, ante la buena evolución que presenta la recuperación física del Monarca, el Palacio Real ha acogido de nuevo esta tradicional ceremonia, en la que cada uno de los seis embajadores ha llegado en carroza desde el Palacio de Santa Cruz, sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, acompañados a caballo por personal civil de Patrimonio Nacional.

Antes de subir hasta la conocida como cámara oficial o del nuncio, donde esperaba el jefe del Estado, cada embajador ha sido recibido en el patio de la Armería del palacio por un destacamento de doscientos miembros de la Guardia Real, ochenta de ellos músicos, que interpretaban el himno de su país.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, acompañaba al Rey en la cámara oficial, donde el Monarca ha recibido en primer lugar a la embajadora tailandesa, Busaya Mathelin, con quien ha evaluado la marcha de las relaciones de España con un país asiático que los Reyes visitaron oficialmente por última vez en 2006.

Don Juan Carlos ha dado la bienvenida en segundo lugar a Kifaya Jamis Miyah al Raisi, la representante diplomática de Omán, un sultanato que el Rey proyecta visitar a finales del presente mes de abril, en el segundo de los viajes al Golfo Pérsico que el jefe del Estado tiene previsto llevar a cabo este trimestre.

A continuación, ha presentado sus cartas credenciales la embajadora de Indonesia, Yuli Mumpuni Widarso, con quien el Rey ha tenido ocasión de tratar el interés de esta nación asiática por la cooperación con España en los sectores de defensa, infraestructuras, agua y turismo.

Tras recibir a Kennedy Jawan, representante diplomático de Malasia -país que concentra el mayor volumen de inversión española en el sudeste asiático y al que ha viajado recientemente García-Margallo-, don Juan Carlos ha dado la bienvenida a la embajadora checa, Katerina Lukesova, con quien ha tenido oportunidad de abordar las perspectivas económicas de la UE.

Ha completado la ronda de presentaciones el nuevo representante diplomático de Marruecos, Mohamed Fadel Benyaich, hijo de madre española y cuyo padre fue médico personal de Hasán II, que sustituye al frente de la embajada al marroquí de origen saharaui Ahmadou Souilem.

Este miércoles, han sido testigos de la ceremonia de presentación de cartas credenciales de los seis nuevos embajadores el jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, el secretario general, Alfonso Sanz Portolés, y el jefe del Cuarto Militar, Antonio de la Corte.