El ministro del Interior y dirigente popular, Jorge Fernández Díaz, y la presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, han coincidido en alertar al presidente de la Generalitat, Artur Mas, de que no es el momento de insistir en la independencia, dada la magnitud de la crisis económica.

Ambos dirigentes populares han participado en el congreso del Partido Popular de Barcelona, en el que ha sido reelegido presidente Antoni Bosch con el apoyo del 84,40% de los compromisarios.

En su intervención, Fernández Díaz ha asegurado que la magnitud y globalidad de la crisis económica demuestra que "no es momento de independencias", como defienden algunos partidos y sectores en Cataluña, sino de "interdependencias".

Ha recordado el ministro que Europa vive una situación complicada e insólita, en la que "la gente habla en los bares de la prima de riesgo" y todo el continente está pendiente de los resultados electorales de un país como Grecia.

"Jamás había sucedido una cosa así", ha indicado Fernández Díaz, que considera esta situación "un símbolo" de hasta qué punto "vivimos en un mundo en el que no hay lugar para las independencias". "Y eso conviene que en Cataluña algunos lo tengan claro. Ahora es momento de interdependencias", ha subrayado, antes de señalar que "la hora de nosotros solos ha pasado a la historia".

Por su parte, Alicia Sánchez-Camacho, que ha asistido hoy a los congresos del PPC en Tarragona, Lleida y Barcelona, ha sido aún más directa y ha pedido al presidente Mas que deje de "mirarse el ombligo" y abandone los derroteros nacionalistas, a la vez que ha advertido del coste "insoportable" que la agenda separatista tiene para Cataluña.

Ha criticado que "el nacionalismo siempre piensa en sí mismo, en su transición nacional", cuando el mundo camina hacia la integración europea, hacia la unión fiscal y el fortalecimiento del euro.

"No se puede ir haciendo discursos separatistas ni hablando de una Europa ingobernable de 70 países con Cataluña independiente", ha afirmado, para añadir que "nosotros queremos una Cataluña fuerte dentro de una España fuerte y una Europa fuerte. Cataluña necesita elevar la mirada, no podemos seguir mirándonos el ombligo".

Ha pedido a Mas que tenga en cuenta que los más de 600.000 desempleados y los 1,2 millones de pensionistas catalanes cobran sus pensiones del Estado y que en el caso de que Cataluña fuese independiente, estarían en peligro.

Sánchez-Camacho ha pedido "lealtad" al gobierno catalán porque "no hay una salida catalana de la crisis", y ha asegurado que el presidente de la Generalitat "perjudica" las posibles inversiones en Cataluña cada vez que habla de independencia.

Tras su participación en el congreso en Barcelona, la dirigente popular ha acompañado al ministro del Interior a Badalona (Barcelona), donde han presidido junto al alcalde de esta ciudad, Xavier García Albiol (PP), la inauguración del Paseo Marítimo.

En el congreso de la provincia de Barcelona, el reelegido presidente, Antoni Bosch, ha expresado su convencimiento de que el PP es "el presente y el futuro" mientras el "socialismo y el nacionalismo son ideologías del pasado".

A su juicio, "la mayoría de los catalanes están cansados de políticos que hablan de temas que no afectan a la gente de la calle. De la crisis económica, no saldremos con grandes palabras sino con propuestas concretas, con voluntad y con esfuerzo".