Los mayos coronan las plazas a pesar de la incesante lluvia

Los mozos llevaron a cabo la pingada excepto los de Covaleda, que prefirieron posponerla a causa de la meteorología

Pingadas de mayos
Pingadas de mayos
Á. Leiva

Al grito de "¡Arriba el mayo!" los mozos de la comarca de Pinares realizaron este sábado la misma acción prácticamente en el mismo momento aunque en diferentes ubicaciones. San Leonardo de Yagüe, Navaleno, Molinos de Duero y Cabrejas del Pinar fueron sólo algunas de las localidades que, tal y como manda la tradición, comenzaron el mes de mayo luciendo en sus plazas largos troncos de pino colocados en vertical gracias a la destreza de los solteros de las localidades, ayudados únicamente con cuerdas y horquillas de madera.


La lluvia incesante dificultó la tarea y en algunos casos la pingada se alargó más de lo habitual pero todos ellos, a excepción de Covaleda, lograron el objetivo. En esta localidad los organizadores prefirieron posponer el evento a otro fin de semana con mejores condiciones meteorológicas.San Leonardo de Yagüe

En torno a 80 mozos de la localidad se afanaron en pingar el mayo, tarea que concluyeron en apenas dos horas. Aunque la lluvia cayó constantemente, al ser fina no impidió que en la Cuesta del Mayo se congregaran numerosos vecinos y curiosos, que no quisieron perderse una de las tradiciones de la comarca de Pinares.


La compenetración y el buen hacer de estos jóvenes hicieron que el acto transcurriera con normalidad y con el característico ambiente festivo.


El mayo, de 23,5 metros de longitud, se cortó en la tarde del miércoles con tronzador de mano en el paraje conocido como Umbría del Carro. Tras una ardua tarea de corte por parte de los mozos, un tractor desplazó el pesado tronco a la pista de acceso al monte para que las vacas serranas, encargadas en esta ocasión de transportarlo hasta la Cuesta del Mayo, no tuvieran dificultades.


Una vez finalizada la pingada, mozos y colaboradores disfrutaron de una comida que, en este caso, tuvo que trasladarse al interior del polideportivo municipal a causa de la lluvia.Navaleno

El terreno ubicado en las inmediaciones del consultorio médico de la localidad, junto a la calle Cañada Real, volvió a reunir este sábado a numerosos mozos para lograr pingar el mayo. La labor les llevó más de dos horas, en las que estuvieron arropados por el ánimo de los vecinos.


Los mozos de Navaleno encontraron en un paraje cercano a La Cruz de Piedra el ejemplar de este año, que fue transportado a la localidad "a huevo", sin ayuda de animales o maquinaria, sólo con un apoyo de dos ruedas. En esta ocasión fue cortado en la tarde del jueves y posteriormente fue llevado por los mozos presentes a la localidad, entre la admiración de los vecinos, donde la comitiva entró ya de noche.Molinos de Duero

En Molinos de Duero la afluencia de asistentes mermó respecto a años anteriores a causa de la lluvia que, como en el resto de localidades, coprotagonizó junto a los mozos que le hicieron frente la jornada. El ejemplar, de unos 23 metros de altura, fue pingado por los jóvenes de la localidad con maestría.Cabrejas del Pinar

Los mozos de Cabrejas del Pinar también lucharon contra los elementos y lograron pingar el mayo pese a la lluvia. Un par de bueyes llegados desde la cercana localidad burgalesa de Navas del Pinar llevaron el mayo desde el paraje de La Nava hasta la plaza después de que los mozos cortaran el ejemplar a primera hora de la mañana. Algo más de dos horas y media tardaron en pingar el pino, en una tarea más complicada de lo habitual debido al astro.Covaleda

La localidad de Covaleda no pudo cumplir con la tradición, recuperada en 2013 por la asociación juvenil Los Bretos.


Aunque todo estaba preparado, la incesante lluvia caída durante toda la mañana impidió que los mozos de la localidad levantaran el pino en el paraje de El Cubo.


El alcalde de la localidad, Hilario Rioja, lamentó que no pudiera llevarse a cabo el acto central de una jornada con marcado carácter festivo. "Se ha decidido suspenderlo porque ha estado lloviendo toda la mañana pero la idea, según nos han transmitido los miembros de la asociación juvenil, es que se pingue más adelante", explicó. Y es que, tal y como indicó, "el mayo se pingará sí o sí".


Por el contrario, el resto de actividades programadas para la jornada (los castillos hinchables y la paellada popular) sí pudieron celebrarse en el interior del polideportivo municipal.


Aunque en esta ocasión no pudo realizarse la pingada el 1 de mayo (el año anterior esta actividad se ejecutó el primer sábado del mes), la recuperación de esta tradición fue una de las apuestas de Los Bretos, que no quieren que este acto tan arraigado en el pasado a la localidad y a sus vecinos vuelva a desaparecer.