La Junta incoa seis expedientes por falta de aturdimiento del animal en sendas matanzas

Los actos investigados se realizaron en las localidades de El Burgo de Osma, Yanguas, Valdanzo, Navaleno y San Leonardo.

Una de las matanzas realizadas en El Burgo de Osma durante 2014.
Una de las matanzas realizadas en El Burgo de Osma durante 2014.
Mario Tejedor

La Junta de Castilla y León ha incoado seis expedientes contra cinco promotores de matanzas del cerdo a raíz de las denuncias presentadas por la Asociación Nacional de Protección de Animales (ANPBA). Las matanzas se celebraron entre 2014 y 2016 en El Burgo de Osma, Yanguas, Valdanzo, Navaleno y San Leonardo de Yagüe, aunque las solicitudes de investigación se llevaron a cabo en 2016, a excepción de una que fue presentada por la asociación en lo que va de año.

Fuentes del Gobierno regional en Soria explicaron que ANPBA ha presentado pruebas visuales de medios de comunicación y redes sociales para denunciar que no se ha cumplido la legislación en relación al aturdimiento del animal previo a su sacrificio, que debe realizarse sin público, por lo que será necesario estudiar si el material presentado se corresponde con los municipios y los años descritos.

Los expedientes incoados relativos a El Burgo de Osma datan de actos organizados en 2014 y 2016. Dos son los realizados en 2015, en Yanguas y San Leonardo de Yagüe, y otros dos en la pasada anualidad, en Navaleno y Valdanzo.

En el caso de que finalmente se decidiera sancionar a los organizadores de estos actos, en ninguno de los casos anteriores afectaría a los ayuntamientos, ya que son diferentes actividades del medio rural las que figuran como impulsoras de los mismos, especialmente durante la época invernal, aunque algunas de ellas las trasladan a días de verano, cuando acude más gente. A pesar de ello, ANPBA sostiene que los ayuntamientos podrían ser responsables como colaboradores de la organización de las matanzas y que además deben garantizar que se cumpla la legalidad en su municipio. La legislación contempla la falta de aturdimiento previo como falta muy grave y la sanción varía entre los 6.000 y los 100.000 euros.

La asociación ha solicitado a la Junta que promulgue y publique en el Boletín Oficial de Castilla y León una nueva orden anual que no sólo contemple la obligatoriedad del aturdimiento previo, correctamente aplicado, sino que también sea preceptiva la inspección veterinaria durante el proceso de la matanza para verificar si se cumple o no la normativa.

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