RELACIONES BILATERALES

La UE y Marruecos ratifican el nuevo acuerdo de liberalización comercial agrícola y pesquera

Los agricultores españoles critican el acuerdo, que incluye una ampliación de los cupos de entrada de producción de tomate marroquí al mercado europeo.

La Unión Europea y Marruecos firmaron ayer un acuerdo de liberalización comercial agrícola y pesquera, un segundo acuerdo para crear un mecanismo de resolución de disputas comercial y un tercer acuerdo en virtud del cual Rabat se garantiza la participación en los programas comunitarios.


El acuerdo de liberalización comercial, que prevé "la liberalización recíproca de productos agrícolas y pesqueros", fue firmado por el viceprimer ministro y ministro de Asuntos Exteriores belga, Steven Vanackere, por parte europea y por el ministro de Agricultura marroquí, Azis Akhenouch, según confirmaron fuentes oficiales europeas.


El acuerdo -cerrado en 2009, pero pendiente del visto bueno de la Eurocámara y el Parlamento marroquí- incluye una ampliación del calendario y los cupos de entrada de producción de tomate marroquí al mercado comunitario, lo que ha sido fuertemente criticado por los agricultores españoles.


La ministra española de Medio Ambiente, Rosa Aguilar, aseguró que habrá un seguimiento "exhaustivo" del impacto del acuerdo comercial de productos agrícolas y pesqueros. La ministra recalcó que este convenio no entrará en vigor hasta 2011.


No obstante, Asaja reclamó al Parlamento Europeo la revocación del acuerdo de asociación de la UE con Marruecos. Según informó la organización agraria, este acuerdo supone un grave perjuicio para los productores comunitarios, ya que se traduce en una mayor apertura en los intercambios agrícolas con Marruecos, y un incremento en las concesiones a las frutas y hortalizas del país vecino.


"Competencia desleal"


En este sentido, calificó el acuerdo de "auténtico mazazo" para los productores mediterráneos de zonas como Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Canarias, debido a la "competencia desleal" provocada por unas producciones con menores costes y exigencias productivas.


Por su parte, el sindicato COAG mostró su decepción ante la ratificación del acuerdo por considerar que la comisión antepone los intereses comerciales al modelo de producción sostenible que demandan los ciudadanos europeos.


La Comisión Europea asegura que, en virtud del acuerdo, "la gran mayoría" de los productos europeos "se beneficiarán de la liberalización total de manera inmediata una vez entre en vigor el acuerdo", mientras que en el caso de "otros productos" la liberalización total del comercio se completará en un plazo de "entre cinco y 10 años", según explicó Zoltan Somogyi en una comparecencia el 1 de diciembre.