SUDÁFRICA

Inquietud en Sudáfrica por la hospitalización de un «frágil» Mandela

La hospitalización del ex presidente de Sudáfrica y premio Nobel de la Paz Nelson Mandela ha causado una fuerte inquietud en el país, tanto entre los políticos como entre la población y los medios.

Mandela fue trasladado el miércoles desde su domicilio en el lujoso barrio de Houghton al Hospital de Milpark, en Johannesburgo, para unos exámenes rutinarios, según la fundación que lleva su nombre, y ayer seguía ingresado.


Los rumores sobre la delicada salud de Mandela se habían reproducido en los últimos días y, el martes, el también premio Nobel de la Paz y arzobispo emérito de Ciudad del Cabo, Desmond Tutu, dijo que, en un acto de una campaña de lucha contra la tuberculosis, en el que coincidieron, lo encontró «frágil». «Está bien, es un hombre de 92 años y está frágil», dijo.


La Fundación Mandela apuntó ayer: «No está en peligro y está animado». Mientras, el diario local 'The Star' señaló que Mandela, retirado de la política y con una salud muy delicada, y al que le fue diagnosticado un cáncer de próstata en 2001, fue examinado por un neumólogo y se encuentra en una zona reservada del Hospital de Milpark, bajo estrictas medidas de seguridad.


Winnie Madikizela-Mandela, la ex esposa de Mandela, salió ayer con lágrimas en los ojos del hospital. La que fue durante años también su compañera en la lucha contra el 'apartheid' no quiso comentar cómo se encontraba.