BIRMANIA

El partido de Suu Kyi será proscrito

El paso a la ilegalidad de la formación opositora que en 1990 ganó los comicios cuyos resultados nunca fueron reconocidos por los generales, se producirá a raíz de la entrada en vigor de la nueva ley que establece la disolución de todas las formaciones que no se han inscrito en el registro electoral.

La Liga Nacional por la Democracia de la Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi, será proscrita por su rechazo a participar en las elecciones que la Junta Militar de Birmania (Myanmar) planea celebrar a finales de año.


El paso a la ilegalidad de la formación opositora que en 1990 ganó los comicios cuyos resultados nunca fueron reconocidos por los generales, se producirá a raíz de la entrada en vigor de la nueva ley que establece la disolución de todas las formaciones que no se han inscrito en el registro electoral.


La formación política de Suu Kyi, de 64 años, decidió boicotear los comicios, cuya fecha exacta de celebración no ha sido anunciada, al considerar que la Constitución promulgada hace dos años por la Junta Militar y las leyes que luego aprobaron son antidemocráticas y garantizan la permanencia de los generales en el poder.


Nyan Win, portavoz de la Liga Nacional por la Democracia (LND), indicó que la formación, que ha resistido a la fuerte presión del régimen militar durante dos décadas, deja de existir y no tiene planes de continuar batallando en los tribunales para evitarlo.


"El Tribunal Supremo nos envió ayer un mensaje en el que nos anunciaba que había rechazado nuestro caso contra la disolución del partido", apuntó Nyan Wyn.


La LND también consideró ilegal el apartado de la ley electoral que obliga a cualquier formación política a expulsar de sus filas a un miembro que cumpla una pena de cárcel o haya sido condenado.


Esta disposición afecta a los casi 2.200 birmanos encarcelados por motivos políticos, incluida la Nobel de la Paz, quien cumple ahora otros 18 meses de arresto domiciliario después de haber pasado unos 14 años confinada en su residencia de Rangún, la antigua capital.


La formación cofundada por Suu Kyi en 1988, solicitó el pasado abril a la alta magistratura que reconociera el resultado de las elecciones parlamentarias de 1990, que ganó con el 82 por ciento de los votos y que la nueva ley electoral anula.


En preparación a su irremediable disolución, activistas de la LND desmantelaron el pasado miércoles la sede del partido, situada al igual que la vivienda de Suu Kyi, en el barrio alto de Rangún.


La ONU y numerosos gobiernos han pedido a la Junta Militar que ponga en libertad a todos los presos políticos, que permita a la principal activista demócrata de país participar en las elecciones y que celebre unos comicios libres y justos si pretende ganarse el reconocimiento internacional.


El primer ministro birmano, Thein Sein, quien la pasada semana renunció a su rango militar a la vez que más de veinte miembros del Gobierno, encabeza un nuevo partido con el que se presentará a las elecciones.


Thein Sein, ahora ex general de Estado Mayor, lidera el Partido Unión Solidaria y Desarrollo, autorizado para pugnar en los comicios legislativos, y en cuyas filas hay al menos 27 ministros y viceministros en activo.


El nombre de este partido político, que tiene visos de convertirse en el oficialista, es casi idéntico al de la mayor organización paramilitar, la Asociación para la Unión Solidaria y Desarrollo, que cuenta con más de veinte millones de miembros.


La renuncia a sus rangos en el estamento castrense permite a este grupo de miembros de la Junta Militar aspirar a los escaños del Legislativo que no entran en la cuota del 25 por ciento del total reservada para los militares.


Hasta el momento, de acuerdo al Gobierno militar, las autoridades a cargo de la organización de las elecciones, cuya fecha precisa no ha sido anunciada, han aprobados una decena de partidos del total de 21 que han solicitado su inscripción en el registro electoral


Los generales rigen Birmania desde 1962, cuando a raíz del golpe de estado el nuevo régimen emprendió una etapa de aislamiento que acabaría con la imagen de país más próspero del sudeste de Asia.