Polonia se replantea las pautas del aborto en caso de riesgo para la vida de la madre tras la muerte de una embaraza de cinco meses
El ministro polaco de Sanidad nombrará una comisión encargada de desarrollar las directrices entre quienes habrá un ginecólogo y un especialista en obstetricia.
El ministro polaco de Sanidad, Adam Niedzielski, anunció este lunes que nombrará a un equipo encargado de "perfeccionar las directrices" sobre los abortos en caso de riesgo para la vida de la paciente, en reacción a la polémica causada por la muerte de una mujer embarazada de cinco meses.
Niedzielski explicó en una comparecencia en Varsovia que en la comisión de especialistas habrá paridad entre hombres y mujeres y que entre ellos se contarán un ginecólogo y un especialista en obstetricia.
El ministro dio a conocer esta información mientras aún se investiga el caso de una mujer embarazada que murió hace poco más de dos semanas en un hospital de Nowy Targ (sur), en circunstancias similares a las de otros abortos retrasados por miedo a consecuencias legales que tuvieron un desenlace fatal.
Según el responsable de Sanidad polaco, se establecerán "pautas aún más detalladas" para este tipo de situaciones que las establecidas en la criticada reforma legal de 2021 que restringió los supuestos para una interrupción del embarazo a casos de violación o riesgo para la vida de la mujer.
Con esa enmienda, la legislación polaca pasó a ser una de las más restrictivas de Europa, al criminalizar incluso la interrupción del embarazo tras el diagnóstico de un deterioro grave e irreversible del feto o de que éste padezca una enfermedad grave o terminal.
En relación a la polémica por la muerte en Nowy Targ, el ministro Niedzielski recordó que "en Polonia, en caso de amenaza para su salud o su vida, toda mujer tiene derecho a interrumpir su embarazo, es decir, a realizar un aborto", pero especificó que cada caso "debe ser tratado por separado".
Por su parte, el Defensor de los Derechos del Paciente de Polonia, Bartlomiej Chmielowiec, que participó en la rueda de prensa junto al ministro, admitió que hubo "irregularidades" en el caso de la fallecida, de 33 años, y que según las informaciones obtenidas sus derechos como paciente fueron violados.
El pasado viernes, la abogada de la familia, Jolanta Budzowska, declaró a la prensa que los facultativos no plantearon a la mujer, que había roto aguas unos días atrás, la posibilidad de interrumpir el embarazo en vista de la gravedad de su estado.
El caso es similar al de Izabela Sajbor, cuya muerte en 2021 -después de que los médicos retrasaran la inducción de un aborto en espera de que el corazón del feto dejara de latir- provocó multitudinarias protestas contra el Gobierno encabezado por el ultraconservador Partido Ley y Justicia (PiS).
