La oposición alemana exige a Scholz que facilite a España el envío de tanques Leopard 2 a Ucrania
El Gobierno español necesita un permiso del de Alemania para exportar estos blindados, que le situarían en la lista de proveedores de armas pesadas a Kiev.
La oposición conservadora y destacados políticos de los partidos gubernamentales alemanes exigen que el Gobierno federal de Olaf Scholz autorice y conceda el permiso de exportación rápidamente para el anunciado suministro a Ucrania de carros de combate Leopard 2 por parte de España. "Debe posibilitarlo urgentemente", afirmó Johann Wadephul, vicepresidente del grupo parlamentario de la Unión Cristianodemócrata y la Unión Socialcristiana de Baviera (CDU/CSU), en declaraciones publicadas ayer por el rotativo ‘Augsburger Allgemeinen’. "Dejamos a Kiev en la estacada cada día en el que no le llegan armas pesadas", añadió Wadephul. Tras comentar que existe la amenaza de que Ucrania pierda la guerra en Donbás, el político conservador destacó que "está en juego la vida de gente inocente, pero también la defensa de Europa ante un agresor imperialista". "Espero que el Ejecutivo conceda rápida y a poder ser proactivamente la necesaria autorización de exportación", señala a su vez Roderich Kiesewetter, experto en Exteriores de la CDU, en el diario ‘Süddeutsche Zeitung’. También la presidenta de la Comisión de Defensa en el Bundestag, Marie Agnes Strack-Zimmermann, ha reclamado una rápida autorización alemana para el envío. "Espero que el ministro federal de Economía, Robert Habeck, conceda inmediatamente el permiso", afirma la política liberal en ‘Spiegel Online’, quien subraya que no hay "tiempo para debates". "A la vista de los fuertes ataques de la artillería rusa contra objetivos ucranianos, hay que actuar con urgencia".
Medios españoles revelaron el lunes, en base a fuentes del Ministerio de Defensa, que el Ejecutivo prepara el envío a Ucrania de unos cuarenta tanques del tipo Leopard 2 A4, de fabricación alemana, así como misiles antiaéreos tierra aire. Para exportar esos carros de combate, las autoridades españolas necesitan una autorización expresa del Gobierno federal germano, un tripartito de socialdemócratas (SPD), Verdes y Liberales (FDP) que lidera el canciller, Olaf Scholz. La ministra española de Defensa, Margarita Robles no quiso ni confirmar ni desmentir esa información y se limitó a comentar que se trata de un "tema extremadamente delicado" que necesita de "gran discreción".
La venta de armas alemanas a otros países va acompañada de una llamada cláusula de destino final por la que el comprador está obligado a pedir permiso a Berlín para su posible reventa a un tercer Estado. Se desconoce si en este caso fue así en su momento, aunque según el ‘Süddeutsche Zeitung’, Berlín no ha recibido por el momento petición alguna de Madrid para facilitar el envío de esas armas a Ucrania.
El presidente de la Comisión Europea en el Bundestag, el Parlamento federal, el verde Anton Hofreiter, ha presionado además a su Ejecutivo para que, aparte de armas pesadas, Ucrania reciba más munición de los países que la apoyan en la guerra contra Rusia. "Está actualmente a punto de quedarse sin ella", señala Hofreiter en declaraciones al periódico ‘Die Welt’, en las que subraya que "necesita rápidamente grandes suministros" de todos los calibres.
Defensas antiaéreas
El envío de este arsenal introducirá a España en el club de proveedores de armamento pesado a Kiev, junto con países como Estados Unidos -que lleva gastados más de 2.700 millones de dólares en suministros de todo tipo-, Reino Unido -igual que Washington, entregará potentes plataformas múltiples de lanzacohetes-, Alemania, Eslovenia, República Checa, Bélgica, Noruega, Turquía o Canadá. La Unión Europea también ha anunciado un paquete de 1.500 millones de euros en equipamiento militar, pero no pesado. Moscú ya ha advertido a los Gobiernos occidentales contra este tipo de misiles, blindados y, sobre todo, de artillería de largo alcance como la prometida por Londres y Washington ante la eventualidad de que pudiera utilizarse para atacar suelo ruso.
En los más de cien días transcurridos desde el inicio de la invasión, el Gobierno ha hecho llegar al Ejército ucraniano ametralladoras, pistolas, munición, botiquines, chalecos antibalas y otros equipos militares. Esta es la primera ocasión en que prevé abastecerlo con una batería para defensa aérea Shorad Aspide -compuesta por misiles de corto alcance tierra-aire capaces de alcanzar aviones o proyectiles enemigos- y cuarenta carros de combate Leopard 2A4. Los tanques permanecen sin usar desde hace diez años en una base del Ejército en Zaragoza y necesitarán una puesta a punto antes de su exportación. España también adiestrará a los ucranianos en el manejo de este armamento.
