​La novia de Lubitz reveló a sus alumnos que estaba embarazada

La pareja sentimental del copiloto es profesora de secundaria que esperaba un hijo, según 'Bild'.

La novia del copiloto del avión de Germanwings siniestrado el pasado 24 de marzo en los Alpes franceses, Andreas Lubitz, reveló recientemente a sus alumnos del centro de educación secundaria donde trabajaba que estaba embarazada, según revela el periódico alemán 'Bild am Sonntag'.


La novia de Lubitz es profesora de secundaria en un centro de una localidad situada a las afueras de Dusseldorf, donde vivía el copiloto del Airbus siniestrado. Lubitz se encerró en la cabina y aparentemente provocó que el avión se estrellara. Las 150 personas que viajaban a bordo murieron.


El 'Bild' ha publicado además algunas frases recogidas por la grabadora de la caja negra del avión, como la del capitán, Patrick Sondheimer. "Por el amor de Dios, abre la puerta. ¡Abre la maldita puerta!", gritó Sondheimer poco antes de estrellarse el avión.


Las grabaciones del vuelo recogidas por la Fiscalía francesa revelan un lapso de once minutos desde que el capitán abandona la cabina hasta que el avión se estrella en los Alpes.


Nada más terminar la comprobación del protocolo de aterrizaje, sobre las 10.27 de la mañana, el copiloto Andreas Lubitz indica al capitán Sondheimer que ya puede abandonar la cabina para ir al lavabo. "Ya puedes salir", dice Lubitz. Dos minutos después, el avión comenzó su descenso.


A las 10.32, los controladores de tráfico intentan contactar con el avión, sin respuesta. Es en ese momento cuando se escucha un golpe en la puerta posiblemente propinado con un objeto metálico. Es el capitán Sondheimer, consciente de que el avión ha iniciado el descenso e intenta entrar.


"Por el amor de Dios, abre la puerta", grita Sondheimer. A las 10.35 --siempre según la hora de la grabación--, se puede escuchar "un fuerte ruido metálico" contra la puerta de la cabina, posiblemente los golpes de hacha que propina el capitán. Desprendimiento de retina

El 'Bild' también revela que Lubitz temía perder su licencia de vuelo por el deterioro de su visión, ya que al parecer sufría un desprendimiento de retina.


Sin embargo, no está claro si esta patología se debe a causas fisológicas o a una enfermedad psicosomática, es decir, que se debería a factores psicológicos como el estrés.


Otro periódico alemán, 'Welt am Sonntag', asegura que el copiloto, de 27 años, "fue tratado por varios neurólogos y psiquiatras", según una fuente de la investigación que ha revelado que se hallaron medicamentos en su apartamento de Dusseldorf.