Nace la APD de Aragón, una asociación para mejorar la formación de directivos

Contribuir a mejorar el tejido empresarial y productivo de la comunidad es el objetivo que se ha fijado la nueva delegación aragonesa de la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), según explicó ayer su presidente, Francisco Bono. En un acto en el que participaron un centenar de directivos y responsables de empresas de Aragón, tanto Bono como el presidente de la asociación nacional, José María Aguirre, presentaron formalmente la que será nueva sede de la APD en la comunidad.

Previo al acto, en un encuentro con los medios de comunicación, Aguirre explicó que la Asociación para el Progreso de la Dirección lleva más de cincuenta años tratando de mejorar la calidad profesional de los directivos españoles. "La APD -dijo- se dedica a la formación para mejorar las técnicas de dirección y para ser más competitivos", un objetivo que cobra una relevancia especial en un momento de crisis económica como el actual. El presidente de la ADP opinó que en una situación de crisis como la que están sufriendo las empresas las cualidades que precisa un directivo son "tener mucha paciencia y confianza en que va a poder triunfar si se esfuerza". Asimismo, animó a los ejecutivos y empresarios "a volver a los principios, a las cosas más simples. Estamos sofisticando mucho los planteamientos -explicó Aguirre-; pasa como con el móvil, ahora compramos un teléfono móvil no para hablar por él sino para hacer fotografías, escuchar música, la radio... Utilicemos el móvil para hablar por teléfono. En la empresa hay que volver a las fórmulas simples porque muchas veces hacemos cosas muy raras, que no son las más convenientes. Hay que simplificar, reducir los gastos y hay que ser competitivo, que es lo más difícil en un mundo globalizado".

Buena formación

En cuanto a la percepción que tiene la APD del nivel de formación e información que tienen los directivos españoles, Aguirre dijo que "están muy bien formados; se están tomando como modelo en muchos países. El prestigio de la empresa española es muy alto; podemos salir de esta crisis trabajando todos", aseguró optimista, aunque aprovechó para reclamar que las administraciones públicas vayan en la misma dirección: "Lo que no puede ser es que las empresas reduzcan gastos y el Estado esté gastando cada vez más en cosas que pueden ser muy interesantes, pero no son para momentos de crisis. Tenemos que apretarnos el cinturón todos".

Por su parte, Francisco Bono recordó a los medios -y reiteró luego ante el auditorio que acudió a la presentación en sociedad de la delegación aragonesa de la APD- que se trata de una "asociación con mucho prestigio y muy profesional. Está dirigida a la formación en información de ejecutivos y directivos y es un motivo de satisfacción que hayan pensado que ya era el momento de constituir una sede en Aragón".

En principio, explicó el presidente de la APD Aragón, la labor de la sede aragonesa será colaborar con la asociación nacional "para estimular a los directivos de la comunidad a que acudan a los seminarios y jornadas que hace la APD en diferentes puntos del territorio". También está previsto que la delegación aragonesa organice cada año cuatro o cinco eventos propios. Bono recordó que la finalidad de la asociación es mejorar la calidad profesional de los directivos "a través de cursos de formación y, sobre todo, de jornadas de reflexión donde acudan como ponentes personas que hayan tenido éxito como directivos en sus empresas y puedan trasladarnos su experiencia. Fijarse en las mejores prácticas de otras empresas", apuntó.

Sociedad activa

José María Aguirre, por su parte, detalló, en su intervención de presentación de la APD Aragón, que en este momento la asociación  -que se creó en 1956- tiene 2.700 socios. Durante el pasado año organizaron 344 actos en los que participaron 1.800 ponentes y contabilizaron 38.000 asistencias de directivos. Recordó también que la APD era una asociación sin ánimo de lucro, que no recibe subvenciones de ningún tipo, "lo que nos convierte -dijo- en un foro independiente, que es lo que nos da prestigio".

Hasta ahora, en Aragón contaban con un número reducido de asociados (en torno a una veintena), algo que confían en que cambie a partir de la creación de la nueva delegación aragonesa.