CRISIS EN LOS AEROPUERTOS

Los pilotos creen que los controladores no están formados para gestionar el tráfico civil

El Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (Copac), se mostró contrario a la posibilidad de habilitar controladores militares para gestionar el tráfico aéreo, tal y como anunció hoy el Ministro de Fomento, José Blanco, ya que estos profesionales "no están formados para gestionar el tráfico civil, siguen otros procedimientos y no están acostumbrados a áreas de gran densidad de tráfico".


En un comunicado, Copac destaca que, como responsables últimos de la seguridad aérea, los pilotos deben gestionar la operación de vuelo con todas las garantías de seguridad. En este sentido, a su juicio, la utilización de controladores militares en sus condiciones actuales, de forma puntual y ajena a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) "no aporta suficientes garantías de seguridad".


Copac aseguró que existen precedentes para cuestionar esta alternativa, como el accidente aéreo que tuvo lugar en marzo de 1973 en las proximidades de Nantes (Francia) en el que se vieron involucrados un avión de Iberia y otro de Spantax, y que dejó un resultado de 68 víctimas mortales.


En aquella ocasión, recordó el colegio, debido a una huelga de los controladores civiles franceses, el control aéreo estaba en manos de militares y "su inexperiencia y falta de conocimiento en el ámbito civil" fueron determinantes en el trágico desenlace, "tal y como demostró la investigación posterior".


Aunque el organismo afirmó compartir la preocupación de Blanco con respecto al impacto económico que la situación tiene sobre el cumplimiento de los servicios de AENA, recuerda que el gestor aeroportuario es un proveedor certificado y regulado por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), organismo independiente "cuya prioridad es el cumplimiento de los estándares internacionales de seguridad para proteger a los usuarios".


"La propuesta de José Blanco se encuentra fuera del escenario normativo internacional, por lo que requeriría una nueva certificación de seguridad de AENA por parte de AESA, además de dejar en entredicho la independencia que debe regir las relaciones entre AENA, AESA y el propio Ministerio de Fomento", recalca el colegio.


Por último, el Copac se mostró esperanzado en que la situación se restablezca lo antes posible garantizando en todo momento la seguridad de los vuelos, "ya que tanto los pilotos como el resto de profesionales del sector, al igual que los usuarios del transporte aéreo, se están viendo afectados por los retrasos de los últimos días", concluyó.

Los controladores

El sindicato de controladores aéreos USCA ha señalado que muchas de las bajas que la Administración dice que son concertadas son de larga duración y ha asegurado que el ministro de Fomento, José Blanco, "no dice la verdad", cuando intenta culpar a este colectivo de una mala gestión de turnos y sobrecarga de trabajo.


El presidente de USCA, Camilo Cela, y el asesor legal del sindicato, Francisco Maroto, han justificado, en una rueda de prensa, los motivos de las bajas de estos últimos días y han señalado que durante el pasado fin de semana, se han registrado 43 bajas el 16 de julio, el mismo número el día 17, y 47, el día 18 en el centro de control de Barcelona, pese a los cual "se ha actuado con normalidad absoluta" en ese aeropuerto.


Desde USCA, "se garantiza la seguridad", aunque, ha reconocido, se aumentan las demoras, ya que dan "el mismo servicio de seguridad con menos personal", pero a costa de la salud.

Bajas en el Prat


La cuarta parte de los controladores aéreos programados para esta mañana en el Centro de Control de Tráfico Aéreo de Gavá (Barcelona) no han acudido al trabajo por encontrarse de baja laboral, según ha informado un portavoz de AENA.


Las mismas fuentes han señalado que estaba previsto que esta mañana trabajaran 53 personas, pero que tras el cambio de turno han faltado un total de trece, con los que el número de controladores que hoy prestan servicio asciende a 40.


Desde AENA se ha señalado que de momento los aviones operan con normalidad y que no se registran retrasos en el tráfico aéreo controlado por el centro de Gavá, pero que habrá que esperar a las horas en las que hay mayor número de vuelos programados para ver las consecuencias que tiene.