El nuevo Meriva comienza a producirse en serie

La segunda generación del Opel Meriva comienza a producirse en serie desde hoy en la fábrica zaragozana de Figueruelas. No serán las primeras unidades que salgan de la cadena de montaje de la planta aragonesa ya que, según el calendario de fabricación avanzado a principios de año por General Motors, desde enero y hasta marzo, se han fabricado ya (como preproducción) 710 Merivas nuevos. Estos vehículos totalmente 'vendibles' se han ido montando a lo largo de estos meses para ser presentados a la prensa, los concesionarios y para clientes especiales. "Lo que comienza hoy -explicó ayer José Juan Arcéiz, presidente del comité de empresa de GM España- es el montaje en serie de la segunda generación del Meriva; desaparece el modelo viejo de la cadena de montaje y ya solo se producirá el nuevo". Para ello, se han aprovechado estos días de inactividad productiva por las fiestas de Semana Santa para cambiar la línea, los materiales, etcétera.

Arcéiz apuntó ayer que está previsto que, en un primer momento, se fabriquen entre 160 y 180 Merivas diarios, volumen que irá aumentando paulatinamente, de tal forma que a finales de mes se llegue ya a los 260-280 vehículos. El presidente del comité de empresa de GM España recordó que la curva de lanzamiento del monovolumen contempla llegar a los 600 Merivas al día.

Puertas traseras novedosas

El nuevo coche fue presentado por General Motors el pasado 4 de marzo en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra, donde levantó una gran expectación y fue recibido con el aplauso de la prensa especializada. "El más aragonés" de los vehículos de GM fabricados en Zaragoza, tal y como lo definió el presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias, se convirtió en uno de los grandes protagonistas de la muestra.

La novedad de las puertas traseras, que se abren en sentido contrario a la marcha, llamó la atención de los visitantes del Salón. "Con esta innovación", apuntó al respecto Alain Visser, vicepresidente de Ventas, Marketing y Postventa, "se facilita la entrada y salida al vehículo de personas de todas edades". "No es una evolución, es una revolución", dijo también sobre el modelo el ejecutivo.

Con el inicio de su fabricación en serie finaliza un proceso que comenzó en 2006 cuando tras largos debates, negociaciones y mucha tensión, Zaragoza se adjudicó el modelo. Hay que recordar que hasta ese momento, el Opel Meriva se fabricaba en solitario en Figueruelas (la primera generación del Meriva salió al mercado en 2003) y que la compañía automovilística decidió abrir una pugna interna en General Motors Europa para estudiar cuál de sus plantas fabricaría la segunda generación del monovolumen. Figueruelas fue finalmente la que se llevó el gato al agua, en dura competencia con la fábrica polaca de Gliwice, por lo que la fábrica aragonesa seguirá produciendo en exclusiva este modelo.

Tras los momentos de inquietud vividos el pasado año -en los que a la mala situación financiera de la matriz de GM en Estados Unidos se unió la reestructuración de su filial europea, con anuncio de venta incluido, que finalmente no se llegó a materializar-, el lanzamiento del Meriva se considera clave este año para la factoría aragonesa.