"No podemos ver el Ebro como problema porque el agua es el mayor capital que tenemos en Aragón". Dicho esto, en palabras del consejero de Agricultura del Gobierno de Aragón, Ángel Samper, lo urgente es el "recrecimiento de Yesa, la herramienta más potente que tenemos para embalsar y desembalsar y evitar los desastres humanos y la extensión del río fuera del cauce" que se viene reptiendo año tras año cuando llegan las crecidas del Ebro.   

En el encuentro que ha mantenido, acompañado del consejero de Medio Ambiente, Manuel Blasco, con la Federación aragonesa de comarcas, municipios y provincias, (Famcp), Samper ha recordado que este jueves se reunieron también con la Asociación de Afectados por las Riadas del Ebro (Asafre) y los 17 municipios implicados y "la primera solución" que vieron, "y la más importante" es el recrecimiento del pantano de Yesa. 

"Ni los alcaldes ni los agricultores ni este consejero entendemos que la no limpieza del río sea una solución", ha subrayado, pero al ser "exquisitamente comprensivos", ha dicho con "cualquier trabajo técnico que se haya hecho", lo que ha reivindicado es que se haga también otro "coordinado entre las dos consejerías de Medio Ambiente, Agricultura, la CHE y la propia Famcp al "estar viendo que los estudios técnicos solo van hacia una parte, la medioambiental pero no hacia las propias poblaciones ni  las explotaciones agrícolas". 

Por eso, ha insistido Samper, se requiere un estudio técnico que recoja no solo la parte de impacto medioambiental sino las afecciones a agricultores y municipios ribereños. "Necesitamos tener un trabajo técnico que comparase y cotejase el trabajo que hace la CHE con lo que reclaman los alcaldes y los agricultores". 

Es un estudio técnico, ha añadido, preciso para "invertir bien el dinero" y evitar que "se vuelva a invertir siempre lo mismo, en motas que se hacen y se deshacen ya que los recursos públicos son limitados ". 

Asimismo, ha reclamado que se establezca entre todos los implicados un  "protocolo de actuación sobre los municipios de mayor fragilidad para que cuando vengan grandes avenidas se aplique y no haya que reinvertir de nuevo en lo mismo".  

Tras la primera reunión mantenida con la CHE, Samper ha reconocido que "hay buena disposición" y lo que toca, ha explicado es "poner todos los datos encima de la mesa, formar parte del mismo equipo la CHE, las dos consejerías y la famcp porque la solución tiene que venir del equilibrio de no valorar solo parte medioambiental sino las afecciones a poblaciones de los municipios ribereños y los agricultores cuyos cultivos que están al  lado del río y que ya no tienen valor al haber perdido con la avenida toda la superficie agraria". 

Samper no ha dado ninguna estimación de los daños ocasionados por la última riada ni del prersupuesto que sería necesario para solventarlos. Únicamente ha reiterado la necesidad del recrecimiento de Yesa y de hacer un estudio técnico entre todos ("la consejería de Agricultura no quiere liderar nada sino ayudar", ha matizado) para buscar soluciones. 

Reponer las motas y limpiar el cauce

Pablo Blanquet, presidente de la Comisión constituida en la Famcp, y alcalde de Pina, ha insistido en que lo que piden al Gobierno de España a través de la CHE, administración competente para la limpieza del cauce del río, es que "proceda a limpiarlo, que se repongan las motas estropeadas durante la ultima riada a la mayor brevedad posible" al "estar a merced de las inclemencias meteorológicas para que en los próximos meses si vuelve a haber otra riada los efectos sean menos gravosos para agricultores y municipios". En el caso de Pina, ha señalado, que han sido 300 las hectáreas afectadas de la huerta de Pina de Ebro. 

"Los alcaldes nos han invitado a venir a la sesión constitutiva de esta comisión de municipios afectados por la crecida y que intentemos buscar soluciones", ha dicho el consejero Blasco que ha querido dejar bien claro que "este asunto es competencia de la CHE porque yo como consejero de Medio Ambiente no puedo hacer en el Ebro lo que quiera sino que depende del Ministerio de Medio Ambiente y Transición Ecológica y no de la administración autonómica". 

Eso sí, ha recordado, "nos debemos a ciudadanos que pagan sus impuestos, alcaldes y hemos venido a escucharles para ver si podemos ayudarles directamente y ser sus interlocutores con la CHE y el Ministerio". Ha recordado que "hay una línea de ayudas publicada el pasado  4 de marzo pero son pequeñas y muy puntuales". 

Por último, ha confesado que lleva años oyendo que "el Ebro pasa de vez en cuando y pide escrituras de propiedad" y "es cierto que el río tiene su cauce y los ayuntamientos su término municipal" y por tanto hay que escucharles. Tras declarar públicamente que no es experto en Medio Ambiente, el consejero ha pedido tiempo porque lleva en el cargo seis meses. Eso sí, ha dicho, va a poner su empeño y buena voluntad en ayudar a los municipios ribereños. 

Por último, Carmelo Pérez, presidente de la Famcp, ha confesado que "soluciones sin fondos económicos es dificil llevarlas a cabo, pero que también aunque no haya mucho dinero saberlo invertir bien es fundamental". Y ha recordado que el Gobierno de Azcón ha aportado un millón de euros para las afecciones por esta riada de 1.600 metros cúbicos, la de menor volumen de los últimos años.